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Regional
Por un incendio y las dificultades para sofocarlo se creó el Cuerpo de Bomberos en 1952
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Un grupo de jóvenes, comandados por el sargento ayudante Baltasar Augusto Echeverría, traído de Caracas, fueron los primeros integrantes de una institución que nació por petición de las fuerzas vivas de una ciudad en expansión y el esfuerzo de sectores diversos, que consideraron como imperioso y necesario la creación de un organismo capaz de reaccionar y atender emergencias
Jorge Armando Hernández Suárez
El incendio de un local en la zona comercial en San Cristóbal y las dificultades que los vecinos y autoridades tuvieron para sofocar las llamas, fueron el punto de partida para la creación de nuestro Cuerpo de Bomberos, que este 28 de noviembre celebra su 67° aniversario.
Corrían los años cincuenta y la necesidad de contar con un organismo capaz de actuar ante una situación de emergencia, en una ciudad en expansión, se hacía imperiosa y es de esta manera que un grupo de emprendedores, empresarios, agrupados en la Cámara de Comercio, junto a las autoridades locales, da inicio a los trámites para la formación de lo que sería el primer Cuerpo de Bomberos del estado Táchira y el tercero del país, proyecto que se cristalizó el 28 de noviembre del año 1952, cuando oficialmenente se procede a su creación.
El viejo galpón que por cien años albergó al matadero de la ciudad y que para entonces servía de sede al garaje del estado, dependencia de la Gobernación del Táchira, en el sector de La Ermita, fue dispuesto para que los apagafuegos tuvieran su primera sede y allí permanecieron hasta el 6 de diciembre de 1954, cuando se les asignó el local que actualmente ocupa la Estación No. 1, en la carrera 2 entre calles 7 y 9, cerca del parque Monseñor Sanmiguel.
El obispo de la diócesis de San Cristóbal, monseñor Dr. Alejandro Fernández Feo, impartiría la bendición del lugar que sería el cuartel general del Cuerpo de Bomberos de la ciudad por casi veinte años.
Nueva sede en 1973
El 2 de noviembre de 1973 se mudan a una nueva y funcional sede, construida en la avenida 19 de Abril, parte alta de la ciudad, inaugurada con bombos y platillos por el entonces presidente de la Republica, Dr. Rafael Caldera Rodríguez.
Reseñan los cronistas que Baltasar Augusto Echeverría, un joven bombero traído de Caracas, con el rango de sargento ayudante, sería el primer comandante de la incipiente institución, que con más valor, entrega y abnegación, que con recursos de carácter técnico, daba inicio a sus operaciones.
Son nueve los hombres que, bajo el mandato, la rígida disciplina y las duras exigencias del sargento Echeverría, adquieren los conocimientos básicos para sortear los peligros que depara el oficio y aprender las técnicas para enfrentar con éxito las diferentes situaciones de emergencia que se pudieran presentar.
Entre este grupo de imberbes bomberos, formados y comandados por Echeverría, se encontraban, entre otros, Rafael Finol, Pablo Marín, Rodrigo Nava, Asdrúbal Salomón y Justo Pastor Daza Porras, este último el primero de una dinastía de bomberos que resultaron fundamentales para el mantenimiento y el avance de la institución, y de quienes haremos referencia en nota aparte.
Correspondió a estos jóvenes, tras la creación de la institución el 28 de noviembre de 1952, y ya formados en los conocimientos bomberiles, montar la primera guardia como personal permanente del Cuerpo de Bomberos de San Cristóbal, en medio de una gran ansiedad y nerviosismo. El 6 de abril de 1953 se registra oficialmente este acontecimiento, protagonizado por seis bomberos y su comandante, Baltasar Echeverría.
A los integrantes de la primera guardia se les recuerda con gran respeto y admiración, hasta el punto que en el área de comandancia del cuartel central “Justo Pastor Daza Porras”, en la avenida 19 de Abril, se mantienen sus fotografías como un homenaje a quienes fueron pioneros.
El primer carro de combate de incendios, un Chevrolet, modelo 1948, traído por don Martín Marciales hijo, costó 48 mil bolívares y su compra fue autorizada por el Concejo Municipal, el 23 de septiembre de 1952, en sesión convocada para discutir y aprobar la solicitud de las fuerzas vivas de la ciudad, que consideraban como urgente y necesario crear un cuerpo de bomberos, para lo cual existía ya una campaña en marcha, motorizada por el gremio de comerciantes.
Como gran novedad, el carro bombero fue exhibido, tanto en la plaza Páez de La Ermita, como en el parque Garbiras, donde decenas de personas se concentraban para admirarlo y escuchar, con emoción, el sonido de su potente sirena.
Ante el excelente trabajo que Echeverría realizó en San Cristóbal, es contactado por la municipalidad de Valera, estado Trujillo, para la creación de los bomberos en esa ciudad, y para ser reemplazado se piensa en el tachirense Justo Pastor Daza Porras. Es enviado a la ciudad capital para ser capacitado y a su retorno, meses después, con el rango de cabo segundo, asume la Comandancia General, dando inicio a una gestión que se considera como la más prolongada en la historia de la institución. Asume en 1952 y permanece en el cargo hasta el año 1978, cuando pasa a situación de retiro con la jerarquía de coronel, la más alta para entonces. Durante su gestión favoreció y propició importantes y significativos cambios que contribuyeron, entre otras cosas, a la modernización de la institución, incluyendo cursos de formación, nivelación y actualización.
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