Regional
A media luz siguen recibiendo clases los estudiantes de la ULA-Táchira
28 de noviembre de 2019
A media luz continúan recibiendo clases los estudiantes de la Universidad de los Andes, hecho que preocupa a toda la comunidad que hace vida en este recinto, entendiendo que pasan los días y nada que llega una solución que permita restablecer el fluido eléctrico.
Durante las primeras horas del día, la falta de electricidad se soporta a medias, gracias a la luz natural; no obstante, hay equipos que sin el fluido eléctrico no operan y esto afecta de manera importante el proceso de formación en esta casa de estudios superiores.
El profesor Omar Contreras recordó que desde hace aproximadamente tres años se presenta este problema, no es una cuestión de ahora; los transformadores habían venido explotando lentamente y, con pañitos de agua tibia, Corpoelec medio solucionaba.
“Pero llegó el momento del estallido de la crisis, durante un fuerte aguacero, porque no hubo la necesaria limpieza de las líneas de los transformadores y eso provocó que con el viento se fueran línea con línea y provocaran el incendio en el transformador, que prácticamente lo achicharró”, contó el profesor.
Esto hace que, aunado al robo de todo el cableado del edificio ‘D’, pues los edificios B y A se hayan quedado sin energía eléctrica, apuntó.
—Si estuviéramos en un gobierno democrático que cree en la universidad, como estructura pensante de la sociedad, inmediatamente, al otro día, hubieran hecho acto de presencia los representantes del Gobierno para resolver el problema, porque es nada menos que la casa donde se está formando el recurso humano para Venezuela, enfatizó el profesor Omar Contreras.
Sin embargo, “como se vive en un Gobierno que no es democrático -señaló-, lamentablemente, en uno de sus programas y planes está la eliminación de la universidad pública, popular, libre y democrática, y le importó un bledo la situación”.
“Hoy los estudiantes de Comunicación Social no tienen electricidad para hacer sus prácticas de radio y televisión; los que cursan las carreras en idiomas modernos, inglés o francés, no tienen laboratorios e igual sucede con los estudiantes de Biología y Química, quienes no pueden hacer sus respectivas prácticas”, apuntó el docente universitario.
Esto también afecta a los docentes que trabajan con otras herramientas que permiten la modernización de las clases, que hoy tienen que volver al pizarrón y a media luz para poder trabajar.
—La universidad está trabajando -subrayó- en las horas que el sol da la oportunidad de que entre su luz por el cristal de las ventanas, pero luego de las tres de la tarde nadie puede dar una hora de clase porque los salones están en la oscuridad plena.
“Esto trae a colación que ni siquiera tienen cómo tomarse un refresco frío o cualquier otro alimento, porque el cafetín en estos momentos carece de electricidad”, apuntó.
Refirió que en las noches, esta universidad es una verdadera boca de lobos. Las aulas están a merced de los ladrones, porque los que cuidan esta casa de estudios no pueden enfrentarse al hampa, porque la mayoría que hace guardia de noche es personal femenino.
Omar Contreras insistió en que es una situación bastante crítica lo que ocurre en la Universidad de los Andes y “mientras se tenga una ULA que no se arrodilla ante el pensamiento único , va a ser muy difícil que arreglen el problema eléctrico; dicen que cuesta una importante cantidad de dólares, que la ULA no tiene, porque esta casa de estudios no recibe presupuesto desde el mes de enero para cualquier circunstancia que ocurriese dentro de la universidad; no hay capacidad financiera, ni siquiera para comprar un bombillo”, concluyó el profesor Contreras.
“Este problema aumenta la crisis”
“En estos momentos la ULA vive una situación muy difícil, porque prácticamente el 75 % del edificio ‘D’ está sin electricidad por el robo de todo el cable, y el ´A´ y ´D´, donde se desarrollan las actividades académicas, tienen 36 días sin este vital servicio”, declaró el profesor Omar Pérez Díaz, vicerrector Académico de la ULA-Táchira.
Precisó que se han hecho los contactos con la gerencia de Corpoelec, que ha manifestado su disposición de colaborar para solucionar esta situación.
Ayer, en la tarde, se reunió un grupo de alumnos con el gerente, que gentilmente ha atendido en la evaluación del problema, pero ellos, al igual que la Universidad, no tienen en estos momentos los recursos para solventar esta situación.
“Los alumnos han hecho una colecta que permite amortiguar un poco la situación y esperamos, con la buena disposición de Corpoelec y del Ejecutivo regional, poder solventar esta semana esta difícil situación que pone en peligro el inicio del semestre, porque en el edificio ‘B’ operan los laboratorios, no solamente de Educación, también de Comunicación Social, y esta falta de electricidad limita el proceso académico”, dijo Omar Pérez Díaz.(NP)