Regional
“79 pacientes con hemofilia en Táchira no están recibiendo el tratamiento”
18 de diciembre de 2019
“Los pacientes con hemofilia pueden llevar una vida normal, siempre y cuando tengan acceso al tratamiento. En Venezuela, hasta el 2015, un niño o un adulto podía trabajar o estudiar normalmente, pero desde enero de 2016, hasta la fecha, se han registrado 66 muertes por la falta de tratamiento”, aseveró Luis Rojas, presidente de la Sociedad para la Hemofilia, a nivel nacional.
—Imagínese a un niño con la rodilla del tamaño de un balón, que no puede ni ir a estudiar, o un adulto que no pueda trabajar -sentenció-.
De igual modo, precisó que esos son datos confirmados con cada uno de los familiares de los pacientes o personal médico, quienes han estado en el frente de batalla de los más de 300 fallecidos, pacientes renales.
Advirtió que el Seguro Social compró fármacos solo por el orden del 1,31 %, después de tres años de no haberlos adquirido, y esto quiere decir que para toda Venezuela durará unas dos semanas este tratamiento. Ahora no se entiende que por una condición como la hemofilia, que estaba totalmente dominada, donde se podía hacer una vida completamente normal, ahora se está en peligro de muerte.
“Es lamentable decir que 101 niños con hemofilia están en peligro de fallecer -aunque ya murió uno por derrame cerebral-; esto es inaceptable, exigimos la salud, esté quien esté; en el Táchira hay 79 pacientes con hemofilia que no tienen acceso al tratamiento”, denunció Luis Rojas.
Insistió en que llegaron fármacos solo para una semana de tratamiento, y eso fue hace dos meses; entonces, el llamado es a que adquieran los fármacos las autoridades del Seguro Social, con las cuales no se ha tenido más comunicación.
Recordó que tienen identificados con hemofilia A unos 2.245 pacientes y con hemofilia B a 585, en todo el país.
Con respecto a la posibilidad de buscar tratamiento en Colombia, aseveró Luis Rojas que una persona con hemofilia, si presenta una hemorragia interna, necesitaría alrededor de 4.000 dólares semanales en tratamiento, pueden ser más o menos, por lo que se debe estar claro en que es de alto costo; a veces, ni siquiera los que tienen dinero pueden hacerse el tratamiento.
“En ninguna farmacia del mundo venden el factor, que es una condición diferente, pues son pocos los laboratorios que la producen, por lo cual este tipo de tratamiento lo dan los Gobiernos; en Cúcuta solo tiene acceso el colombiano, o a veces el venezolano, y ya se han tenido dos casos en Perú, donde las personas con hemofilia se devuelven a Venezuela porque, a través de la Asociación Venezolana de Hemofilia, reciben una cooperación técnica de emergencia a través de la Corporación Mundial de Hemofilia”, pero se trata de casos de vida o muerte.
Asimismo, dijo que desde hace tres años las personas con hemofilia se están discapacitando y esto se convierte en una mayor carga para el Estado, porque la articulación con sangre se deteriora, a tal punto que hasta niños de tres años están en muletas, sillas de ruedas, si no mueren de una hemorragia importante.
Hoy se ven niños que a los doce años ya tienen una rodilla o un brazo encogido, y esto es doloroso porque ya se había erradicado y Venezuela era pionera en el cubrimiento del tratamiento de esta enfermedad, y angustia aún más cuando ya en el mundo se habla de que la cura ya es posible, pero en este país se está regresando a los tratamientos de hace veinte años, que crean reacciones, como las ampollas, dijo.
“Si yo hubiese tenido un trauma cerebral, en estos momentos, me muero”; afortunadamente, lo sufrió hace trece años, cuando sí había tratamiento.
“Ocupamos el primer lugar en defunciones por cáncer”
“En estos momentos el estado Táchira es el de mayor incidencia de cáncer en Venezuela, debido a factores geográficos que inciden sobre todo en la parte de las patologías de vías digestivas y de cáncer mamario”, afirmó el doctor Simón Peraza, médico patólogo que labora en el Centro de Control de Cáncer Gastrointestinal.
Entre 2013 y 2017 hubo 124 mil 284 defunciones por cáncer, y en Táchira, 1.075 casos solamente en el 2013 y en el 2016 se presentaron 1.134 muertes, con una tasa de 90 %; esto se convierte en un calvario para el paciente, si se toma en cuenta que ningún servicio de patología sirve en el estado, a excepción del Centro de Control de Cáncer Gastrointestinal “Luis Anderson”, lo que se traduce en que las personas sufren un retroceso en el diagnóstico, dijo.
En tal sentido, explicó que cuando no se puede procesar una biopsia en el momento, porque no hay insumos, reactivos ni anticuerpos, el médico no puede emitir un diagnóstico y mientras tanto el paciente continúa sufriendo, llegando al momento en que el tumor es inoperable.
Si supera esta fase, refirió el doctor Simón Peraza, viene el quirófano, donde se debe tener la parte de imagenología y de no contarse con este estudio para saber qué operación se debe hacer, hay que suspender la intervención, y si de nuevo tiene que esperar unos dos años, ya el cáncer tiene metástasis, relató el doctor Peraza.
—La situación no es fácil -aseveró- y lo que más angustia es que se pueden hacer muchas cosas, pero el Gobierno se empeña en no atender la salud, pareciera más bien que quiere que aumenten las muertes para tener menos población -sentenció-.
“De 500 enfermos renales registrados casi la mitad ha fallecido en un año”
“En el año 2018 se tenían registrados 500 pacientes renales en el estado Táchira , lamentablemente a la fecha de hoy, diciembre de 2019 solo se tiene 236 pacientes, es decir, que se ha perdido la vida de un poco menos de la mitad, por falta de tratamiento, problemas con las diálisis; además las situaciones con la electricidad menguan el acceso de calidad de vida de los pacientes y es por ello que se tienen cifras rojas para este momento”, declaró Beatriz Salas de la Fundación Proyecto 860.
Indicó que estas cifras en salud son muy duras, sin embargo, forman parte de la realidad, y están registradas sobre todo con datos de los familiares que hoy sufren la pérdida de sus seres queridos, quienes acompañaron en más de una oportunidad al paciente en los tratamientos de diálisis.
Por otra parte señaló que basados en el informe de Fundacidarta, se puede decir que hoy hay registrados 5.438 casos de pacientes con VIH, los cuales en un principio recibían el tratamiento retroviral en tres esquemas, que no volvieron a llegar a Venezuela, desde hace dos años, no obstante, la fundación a través de organizaciones internacionales ha recibido la dotación para ese tipo de pacientes pero en un solo esquema, es decir, se redujo, de tres fármacos a uno”, declaró Beatriz Salas.
Aparte de esta situación, precisó, que estas organizaciones solicitaron al Hospital de Cúcuta, Erasmo Meoz, que le realizaran las pruebas, porque en el Táchira no hay reactivos, y hay un médico que le hace el respectivo examen médico, y se apoya con medicamentos.(NP)