Regional
Un completo desastre la vialidad en el barrio Riberas del Torbes

La vialidad en la comunidad de Riberas del Torbes raya en el desastre, pues sus calles ya son intransitables por la gran cantidad de huecos, aunado al daño de la red de alcantarillas, lo cual se traduce en enormes contratiempos para los conductores, quienes deben sortear estas afectaciones sin que dañen sus unidades.

El estado de la vialidad, pero sobre todo en inmediaciones de la zona industrial, es todo un poema a la desidia. Pues pese a tratarse de un área netamente económica por las empresas que están asentadas en Riberas del Torbes, ésta no recibe desde hace años mantenimiento, lo cual ha causado que la red vial se deteriore.

Actualmente en al menos seis tramos, extensos huecos crean contratiempos para quienes transitan con sus carros por ese corredor, aunado a los transportistas que a diario deben recorrer al menos unos cuatro kilómetros de carretera completamente destrozada.

Para amortizar un poco el mal estado de las calles, pero sobre todo de la vía principal, los residentes de la comunidad han optado por rellenar muchos de los agujeros con escombros, lo cual en momentos que se presentan lluvias desencadena nuevos contratiempos, pues por tratarse de materiales no compactados, se convierten en lastres que afectan la movilidad.

Alcantarillas dañadas y obstruidas

Indudablemente que un factor que afecta seriamente las calles de Riberas del Torbes, tiene que ver con el mal estado de las alcantarillas y drenajes, pues casi la totalidad de ellos no sirven o están saturados de escombros, basura y sedimentos, ya que en muchos años no han sido drenados.

Juan Carlos Pinzón asegura que los daños en las vías sólo son comparables con las alcantarillas, ya que ambos son esenciales para que persista el buen estado de la calle:

“Las alcantarillas nunca las limpian. Eso genera daños que con el tiempo se convierten en irreparables; muchas de esas estructuras se han deteriorado o sencillamente se han partido, transformándose en armas e instrumentos que dañan los cauchos de los carros, eso es un mal ya endémico al que no le vemos solución, pues pese a las denuncias que se han hecho, jamás las reparan”.

A causa de la falta de mantenimiento, algunas tuberías de aguas blancas han colapsado igualmente, lo cual ha impactado negativamente las aceras, por lo que muchas de éstas tienen que ser demolidas y construidas nuevamente para el uso de los peatones.

Como si fuera poco, el servicio de alumbrado público es inexistente, ya que bombillas y red de distribución están completamente deterioradas.

(Pablo Eduardo Rodríguez)