Feligreses, junto a monseñor Mario Moronta, Obispo de la Diócesis de San Cristóbal, celebraron el primer domingo de la Palabra de Dios, instituido por el Papa Francisco, en la parroquia San Juan Bosco en Táriba, el pasado domingo 26 de enero.
El domingo de la Palabra de Dios es un llamado a todos los cristianos a no dejar la Biblia como uno de los muchos libros en el estante de casa, quizás lleno de polvo, sino como un instrumento que despierte la fe, dijo el Obispo.
Asimismo, en la celebración eucarística, el Prelado bendijo el nuevo confesionario del templo y a cuatro nuevos proclamadores de la Palabra de Dios.
El Obispo como un gesto simbólico entregó cuatro cajas de biblias para ser llevada a los enfermos de la comunidad parroquial y, bendijo las biblias que llevaron los feligreses.
En su homilía invitó a leer asiduamente las Sagradas Escrituras: “cuando nos reunamos como familia en una comida o en cualquier actividad les invitó a leer un trozo de la Palabra de Dios”.
Les recordó también que “la Palabra de Dios no es para tenerla sólo en un lugar bonito sino para leerla y leyéndola se coloque en práctica, así como lo hicieron los santos, pues ella es luz del mundo y nosotros estamos invitados a hacerlo también”.
Al final de la Eucaristía, el Obispo anunció que en este año de la “Iglesia en salida” que celebra la Diócesis de San Cristóbal, los laicos junto a los sacerdotes y religiosos saldrán a las periferias de la región para anunciar la Palabra de Dios.