(AFP) De regreso en Venezuela tras su gira internacional, Juan Guaidó quiere ser profeta en su tierra. Con renovado apoyo de sus aliados, el opositor intenta elevar la presión contra el gobernante socialista Nicolás Maduro, pero enfrenta el desánimo popular por la crisis económica.
Burlando una prohibición de salida del país, Guaidó emprendió el 19 de enero un periplo por Colombia, Europa, Canadá y Estados Unidos, donde se reunió con líderes como el británico Boris Johnson y el francés Emmanuel Macron, y fue recibido por el presidente estadounidense, Donald Trump, quien prometió aplastar la «tiranía» de Maduro.
Su desafío ahora es que ese respaldo no se reduzca a un álbum de fotos, sino que reavive su ofensiva por el poder.
¿Qué escenarios abre el retorno del dirigente, reconocido como mandatario encargado por medio centenar de países?
– Encender la calle –
Guaidó, cuya jefatura del Parlamento no es reconocida por el gobierno de Maduro, alista una «gran movilización» contra el presidente, a quien acusa de haberse reelegido en forma fraudulenta en 2018. No ha fijado fecha.
Pero encara la apatía de opositores que experimentan un «derrumbe de expectativas», señaló a AFP Benigno Alarcón, director del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello.
Su gira es una «obra de arte efímera» mientras no «concrete su oferta de cambio», considera a su vez Luis Vicente León, presidente de la encuestadora Datanálisis.
El dirigente de 36 años no ha logrado el prometido «cese de la usurpación», primer paso de su estrategia hacia un gobierno de transición que llame a elecciones.
Sus convocatorias se redujeron de decenas de miles a principios de 2019 a pocos cientos de asistentes en los últimos meses y su popularidad, según Datanálisis, cayó de 63 % a 38,9 %.
«No va a pasar nada (…), se lo comerá vivo su propia gente», previó el número dos del chavismo, Diosdado Cabello.
Venezuela ha atravesado varias oleadas de protestas contra Maduro desde 2014, con unos 200 muertos.
– Más sanciones –
Tras el encuentro Trump-Guaidó, Washington sancionó a la aerolínea estatal Conviasa.
Amplió así una batería de castigos que incluye un embargo petrolero desde abril de 2019 y un bloqueo financiero que impide renegociar una deuda de unos 140.000 millones de dólares.
En Bruselas, Guaidó urgió a la Unión Europea a impedir las exportaciones del «oro de sangre», como califica las operaciones auríferas del gobierno chavista, ya sancionadas por Estados Unidos.
Se prevé «un esquema de sanciones con mayor coordinación internacional», según Alarcón.