Aún no hay rastros del submarino ARA San Juan, que lleva perdido seis días, informó este martes la Armada argentina.
El operativo de búsqueda avanza contrarreloj para hallar la embarcación antes de que se termine la reserva de oxígeno que garantiza la supervivencia de los 44 tripulantes, reporta Últimas Noticias.
En las últimas horas, los 14 barcos y 10 aviones que rastrillan las zonas afectadas a la búsqueda, incluida la cuadrilla estadounidense, divisaron una balsa vacía y vieron el destello de dos bengalas blancas, sin embargo, el vocero de la Armada, Enrique Balbi, descartó que fueran del submarino.
Explicó que tanto la balsa no es la ARA San Juan como así tampoco las bengalas, ya que las del submarino son rojas-, aunque advirtió que siguen el rastro de una posible segunda balsa, desde donde se podrían haber activado las luces de emergencia. “Como submarinista, no pierdo la esperanza”, finalizó el vocero, quien afirmó que este martes “estamos en el sexto día de oxígeno”, pero evitó precisar cuánto tiempo más cuenta la tripulación.
Desde la Armada sostuvieron que si el submarino se encuentra sumergido, el séptimo día representa “la situación más crítica” ya que se acerca el límite de tiempo en que el submarino necesitaría salir a la superficie para hacer snorkel y renovar el oxigeno.
En la mañana del 15 de noviembre el submarino de la Armada Argentina ARA San Juan perdió contacto durante su recorrido desde la Base Naval Ushuaia hacia el apostadero de la Base Naval Mar del Plata. La última señal del sumergible fue registrada a la altura del golfo San Jorge, en aguas argentinas del océano Atlántico, a 432 kilómetros de la costa de la provincia de Chubut.
De acuerdo con RT, el pasado lunes, el vocero de la Armada de Argentina, Enrique Balbi, anunció la detección de un ruido en el área de búsqueda del submarino argentino ARA San Juan. Sin embargo, en las últimas horas se confirmó que “el ruido constante” no corresponde al sumergible.
En esa oportunidad, el vocero instó a los familiares de los miembros de la tripulación del submarino a “tener paciencia” y “trasmitir objetividad” en los datos para no crear falsas esperanzas.