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25 de noviembre de 2024
El problema de la electricidad se agudizó la semana pasada. Apagones en los dos Capachos, El Piñal, Naranjales, Táriba, Cordero Guásimos, San Cristóbal…en gran medida, la paralización del estado Táchira
Nancy Porras
Este fin de semana, en los 29 municipios del estado Táchira se hicieron más largos y frecuentes los cortes de electricidad, hecho que indignó a toda la población, que hoy pide una explicación técnica, real, sobre lo que está sucediendo con el fluido eléctrico.
Desde el jueves, los apagones aumentaron. Muchos comerciantes estaban indignados por los intermitentes cortes de electricidad que frenaban la producción prevista para aprovechar el Día San Valentín, al tiempo que temían que la situación fuese la misma el día viernes.
Los pronósticos no se equivocaron. Los apagones continuaron y, con ello, la frustración de los tachirenses, que incluso en medio de la impotencia elaboraron mensajes sarcásticos que fueron publicados por las distintas redes sociales.
El sábado, la situación empeoró en todo el estado Táchira. Los apagones se multiplicaron y, por supuesto, no hubo explicaciones por parte de Corpoelec.
“Este ha sido el peor de los sábados en cuanto al suministro de electricidad”, comentó Cecilia Castro, vecina de Palo Gordo. “Se fue la luz a las tres de madrugada. Legó a las seis de la mañana y a las nueve volvieron a quitarla, hasta la cuatro de la tarde. Va a llegar el momento en que pasen días enteros sin llegar la luz”, dijo.
Días de terror
“En Guásimos fueron días de terror. El vienes se fue a las nueve de la noche y llegó a las tres de la mañana. La gente que iba trabajar se levantó un poco más temprano, temiendo cualquier cosa: Hubo otro apagón a las diez de la mañana. Los cortes son tan seguidos que no vemos en todo el día la luz artificial”, precisó Alejando Moreno.
Emprendedores afectados
“Los emprendedores no sabemos qué hacer. Tenemos una venta de tortas y con la debida antelación nos preparamos para atender a los clientes en el Día de San Valentín, pero la luz no nos dejaba trabajar. Estábamos en Táriba, preparando una torta, y se iba la luz; corrimos hacia Palmira para preparar la crema chantillí y, cuando apenas se prendió la batidora, se fue la luz. No sabíamos qué hacer. Seguimos para El Abejal y logramos batir la crema, y de nuevo movilizarnos a Táriba. Esto no es vida. Estamos desesperados. Buscamos la forma de sobrevivir, tomamos otras alternativas, pero de verdad ya no se puede, así nadie progresa”, contó una familia que desde hace dos años se dedica a hacer tortas, pero debe superar todos los días los obstáculos de la electricidad; ruegan a Dios, para que no corten la electricidad y así cumplir con los clientes.
En San Cristóbal, la historia de la electricidad el fin de semana fue la misma. En todos los sectores pasaron horas y horas sin fluido eléctrico, siendo afectados de manera particular los vecinos de Barrio Obrero, Pueblo Nuevo y La Concordia, los cuales el fin de semana apenas vieron la luz del día, porque la artificial brilla por su ausencia.
“Dígame yo, salí de mi casa para asistir a la cita de mi niña de tres años con el pediatra. No había electricidad, cuando llegué al consultorio se había ido la luz. Al salir, previendo que la luz no había llegado a mi casa en Santa Teresa, fui a visitar a la suegra en La Concordia y ya punto de caer la tarde, regresé a mi residencia y me conseguí con la sorpresa de que todo estaba a oscuras, es decir, pasé todo el día sin ver la luz artificial”, narró María Gabriela Moros.
Otro de los afectados por los cortes de luz, Miguel Moncada, conductor de una unidad de transporte público, expresó con molestia su preocupación por tan delicado problema.
“No sé hasta cuándo será el problema de la luz. Ya no podemos ni ver televisión”, dijo. “Yo me emociono planificando y digo: cuando llegue a casa, me baño, ceno y me pongo a ver uno de los partidos de fútbol de la Liga española, y mi esposa se prepara para ver en otro cuarto las novelas; cuando de repente sentimos el golpe: se fue la luz, o sea, no podemos ver televisión para descansar un rato”.
El problema de la electricidad esta semana se agudizó y un reflejo de ello fueron las redes sociales, donde desde Capacho, El Piñal, Naranjales, Táriba, Cordero, Guásimos, San Cristóbal, reportaban con indignación los constantes apagones, que se traducían en gran medida en la paralización del estado Táchira.
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