A 7 años de la desaparición física del maestro Simón Díaz, tras una larga lucha contra el alzhéimer. La memoria y el legado cultural del “tío favorito de Venezuela”, se mantiene intacta, su música es representación de la Venezuela pujante, la inspiración y el frescor de sus sabias letras.
El alcaraván cantó en la población de Barbacoas aquel 8 de agosto de 1928, para darle la bienvenida a Simón Narciso Díaz Márquez, un aragüeño, que dejaría el corazón en los llanos. Del rasgar de su cuatro se elevaron bellísimas tonadas y recio joropo, para dar forma a canciones que lo convirtieron en el más célebre intérprete de la música popular venezolana.
Este 19 de febrero diferentes emisoras se escucharon programas dedicados al tío Simón canciones como Caballo Viejo, El Becerrito, El Niño Jesús Llanero, Tonada de Luna llena, el Alcaraván entre otras han sido interpretadas por cantantes nacionales e internacionales, quienes siempre le dan ese toque especial a los diferentes ritmos en los que el cantautor se inspiró.
Siempre se destacó por su buen humor, compromiso y la forma exquisita en cada composición. El artista falleció en Caracas el 19 de febrero de 2014 a la edad de 85 años, tras el deterioro progresivo de su salud.
Distinguido con la Orden del Libertador en su Orden de Gran Cordón que es la máxima condecoración que otorgaba el estado venezolano, constituyéndose como el único artista nacional al que se le haya impuesto, en el año 2000 fue nominado al Premio Grammy por mejor disco tradicional latino. En el año 2008, se hizo acreedor del Grammy Latino a la Trayectoria, gracias a la postulación desde un portal de Internet donde se recaudaron firmas para ese galardón.
Simón Díaz ejemplo para todas las generaciones, su voz se mantiene viva en cada interpretación que se hace de su música desde las voces infantiles hasta los más destacados artistas a nivel internacional. (Recopilación: María Teresa Amaya)