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Sucesos
Sin ninguna pista del docente jubilado desaparecido hace un mes en Coloncito
5 de marzo de 2020
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La familia del docente jubilado Wolfang Arfilio Sánchez Ramírez, de 47 años, se encuentra preocupada desde hace un mes, cuando el 5 de febrero sorpresivamente desapareció, en Coloncito, municipio Panamericano, sin dejar el más mínimo rastro.
La angustia de sus seres queridos estriba en que están casi seguros de que algo malo le ocurrió, por cuanto aseguraron que Wolfang no es persona de desaparecer sin avisar a la familia, y mucho menos por tanto tiempo.
El hecho es que en el sector del barrio Bolívar, en la casa donde estaba viviendo solo y cuidando a la vez, perteneciente a una hermana suya, no evidenciaron señales de violencia. Están todas sus pertenencias, incluso su teléfono celular -del cual no se desprendía-, pero sí notaron lo que aparentemente les infirió que pudo haber tomado un bolso con alguna ropa, antes de desaparecer.
Yaiseiby Sánchez, sobrina de Wolfang, especificó que, tras jubilarse como docente, comenzó a trabajar como vigilante en una quesera del municipio Panamericano, a la cual, de acuerdo al último mensaje que envió a su patrón, renunció el mismo día que desapareció. Esa fue también la fecha en que, según su celular, estuvo conectado.
“Los vecinos dicen que no lo volvieron a ver más. Yo tengo el celular porque lo encontré en la casa y debo llevárselo al Cicpc, donde ya hicimos la denuncia. Hemos revisado detalladamente los mensajes y llamadas, pero no vemos nada raro en ellos. Hay otros números, pero no responden las llamadas. En el último mensaje que envió, escribió: ´buenos días patrón, lamentablemente no puedo seguir trabajándole, y Dios me le pague por todo´. Y tampoco volvió al trabajo”, explicó la joven.
—En caso que él haya decidido irse, debía haber hecho varias cosas antes, porque es una persona muy responsable y organizada. Por ejemplo, como estaba cuidando la casa de mi hermana, él le habría entregado las llaves o por lo menos habría avisado que se iba a ir. Nunca habría dejado las bombonas de gas en la parte de afuera de la casa; tampoco un mercado que encontramos, y menos se habría ido sin su celular. O sea, dejó la casa como si fuera a regresar, no como si se hubiera ido de viaje. Es decir, son muchas cosas que nos dan la impresión que pudieron habérselo llevado por la fuerza. Es como si hubiera recogido la ropa que pudo, y se fue o se lo llevaron— acotó.
Indagando entre su entorno laboral, la familia de Wolfang confirmó que no tenía, o por lo menos el docente jubilado no lo manifestó, tener problemas de ninguna naturaleza, por lo que el saber que abandonó el trabajo de esa manera tan inusual y repentina, tomó por sorpresa a su jefe y a los compañeros de la quesera.
Por ello, se agradece a quien tenga alguna información sobre el paradero de Wolfang, hacerla llegar a través de los números telefónicos: 04142000684 y 04126618432. (MB)
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