Regional
Funcionarios de seguridad insistieron más en el uso de tapabocas en sitios públicos
18 de marzo de 2020
Con una mayor insistencia por parte de los organismos de seguridad en el uso de la mascarilla o tapabocas, transcurrió el tercer día de la cuarentena social, mientras la población se va acostumbrando al encerramiento casero, que apenas si se rompe para ir en busca del obligado aprovisionamiento de productos de primera necesidad.
El escenario de calles solitarias es mayor por toda la ciudad. Se observa movimiento en los lugares donde los usuarios compran alimentos, y se ha requerido una mayor presencia de los organismos de seguridad.
Esto se vio, entre otros puntos en los alrededores del Terminal de Pasajeros de La Concordia, donde un contingente de la Guardia Nacional, bajo la orientación del director de Tránsito, Luis Moreno Lizcano, previno el caos de vehículos.
Pero esta función, amén de las que le son propias en cuanto a la seguridad pública, no solo fue la única que los organismos de seguridad tuvieron que ejercer, pues a esta se sumó una relativamente inédita: la concientización entre la población del uso de las mascarillas.
En este sentido, en abastos y panaderías que permanecen abiertos se conminó a sus administradores a limitar el ingreso a esos establecimientos, y en algunos se atendía desde la entrada.
Esta labor se trasladó a supermercados donde los consumidores no podían ingresar sin el uso de este utensilio. De otra parte, se estaba obligando a los que estaban en cola mantener una distancia de metro y medio, en lo posible.
A las unidades de transporte igualmente ingresaban efectivos policiales, y recordaban la medida que es de uso obligatorio. En una unidad cubría una ruta suburbana, se vio a pasajeros que con gestos de desagrados reprobaron la advertencia, mientras otros sacaban los que guardaban en sus bolsos y bolsillos.
Ante la actitud negativa de varias personas, los uniformados les recordaron que en China, las personas que no acatan las normas higiénicas pueden ir a prisión, cuando son sus mismos conciudadanos los que obligan a su acatamiento.
Incertidumbre por el transporte público
El transporte público se mantenía activo en el mismo porcentaje de estos días; y que permanezca así, siempre y cuando no se de una reducción en el suministro de gasoil, uno de los temores más difundidos entre los transportistas.
Taxistas y mototaxistas, pese a la falta de gasolina, seguían laborando, y aunque admitieron que estos dìas han estado «flojos» han podido hacer algo para llevar a su casa, especialmente hacerse del efectivo que les permitiría sobrellevar este periodo de cuarentena. Sin embargo, a eso de las tres de la tarde muchos preferían volver a su casa.