En el quinto día de cuarentena se observó en el municipio Guásimos más personas con tapabocas quizá por la decisión de los administradores de negocios de no dejar entrar al abasto de no portar este insumo como medida de protección para todos.
El transporte público no funcionó. Los dueños de las unidades cumplieron con la decisión del Sindicato de Transporte de resguardar los vehículos argumentado la escasez de gasolina y gasoil, hidrocarburos que también han escaseado en los últimos días
Algunas personas se levantaron más temprano con el propósito de conseguir vehículo para bajar a Táriba o San Cristóbal, pero fue casi imposible y se encontraron en medio de tres opciones: caminar, pedir cola o irse a casa de nuevo a pesar de tener que trabajar o cumplir un compromiso ineludible.
Las paradas de pasajeros se quedaron solas, porque la esperanza de que bajara una unidad de Transtáchira se esfumó, aun cuando la gente esperó porque el jueves esta flota trabajó unas horas. “Yo me bajé en uno rojo el jueves. Iba full pero logré subirme y trasladarme a San Cristóbal, pero hoy fue imposible” precisó Marjovan Martínez.
En las primeras horas de la mañana hubo cierto movimiento de vehículos de manera especial en la calle principal, vía Panamericana, no obstante, después de la una de la tarde, fueron pocos los vehículos que pasaron, hecho que demuestra que la gente se guarda temprano y que cada día hay menos gasolina para poder movilizarse.
Sobre todo se vieron motos, cuyos conductores portaban sus tapabocas y ya sobre las dos de la tarde prácticamente todos el comercio estaba cerrado y en la plaza Bolívar reinaba la soledad mientras que caía una tenue brisa muy parecida a la de la noche del día jueves.
Otra vez los habitantes estaban impresionados por el incremento de los precios en los productos. “Ya ni tomate se puede comprar por apenas cuatro debí para noventa mil bolívares y eso no me parece justo, y otras parte se ve el aumento de los productos que venden en pesos, quieren también llevar la hiperinflación en pesos y esto es un exabrupto, ya nadie puede comprar, la semana pasada medio cartón de huevos en 3500 pesos hoy está ese mismo cartón en 7000 pesos” contó el señor Pablo Mora, quien vive en el Centro de Palmira.
Nancy Porras