Salud
Academia de Medicina alerta sobre uso de Interferón: No hay pruebas para tratamiento del Covid-19
23 de marzo de 2020
La Academia Nacional de Medicina (ANM) advirtió este domingo 22 de marzo que el uso del Interferón no “tiene demostrada utilidad terapéutica” para el combate contra el coronavirus (Covid-19).
La institución emitió un comunicado este domingo 22 de marzo, en conjunto con la Comisión de Bioética. Allí detalló que el tratamiento aún no cumple con las normas relativas al uso de fármacos en seres humanos a nivel nacional (testeo a cargo del Instituto Nacional de Higiene “Rafael Rangel“) e internacional (a cargo de la Asociación Médica Mundial).
“La ANM, considera su obligación alertar sobre el uso, en los pacientes afectados por Covid-19, de fármacos como el Interferón alfa 2, que no tienen demostrada utilidad terapéutica y seguridad”, reza parte del comunicado.
En este sentido, señalaron que “la aplicación del Interferón alfa 2 debe considerarse como un tratamiento experimental” y como tal requiere del cumplimiento de requisitos bioéticos establecidos, tales como la opinión de una Comisión de Bioética autónoma o de un grupo de expertos independientes.
👉Declaración: La Academia Nacional de Medicina considera su obligación alertar sobre el uso, en los pacientes afectados por #COVID19 de fármacos como el Interferón alfa 2 (cubano), que no tienen demostrada utilidad terapéutica y seguridad,
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— Alianza Venezolana por la Salud (@alianzavsalud) March 22, 2020
Sugieren que el medicamento «solo debería ser considerada en ausencia de otras alternativas de tratamiento de eficacia y seguridad comprobadas y previo consentimiento informado por escrito del paciente o de su representante legal y en situaciones extremas mediante un programa de uso compasivo».
Recomendó que «en estos casos, los pacientes y sus familias deben tener acceso a información imparcial, válida, suficiente y precisa y conocer las incertidumbres sobre los posibles resultados antes de tomar una decisión sobre la aceptación de un tratamiento experimental».
Por otra parte, la academia dijo que «es comprensible que las personas afectadas por la enfermedad mencionada, puedan estar dispuestas a someterse al tratamiento, a pesar de las incertidumbres sobre la eficacia o seguridad del mismo. El desafío consiste en garantizar que los pacientes estén protegidos contra efectos indeseables, especialmente si los tratamientos se ofrecen fuera de la debida regulación».