Infogeneral
Costumbres de Semana Santa| Quemar incienso y rezar los 33 credos
10 de abril de 2020
José Luis Guerrero
Quemar incienso de siete potencias, encender una vela o un velón por la salud de la humanidad y rezar los 33 credos el Viernes Santo son tres costumbres propias de la Semana Santa que muchas familias realizarán en sus hogares en los próximos días.
Los católicos creyentes, con toda su fe, pedirán a Dios, el ser superior, por la salud de toda la humanidad y que se logre el control de la pandemia de coronavirus, que ha obligado a las autoridades de la iglesia católica a cerrar todos los templos para evitar aglomeración de personas, y suspender toda la programación habitual para los días santos, la cual se cumplirá a puerta cerrada.
“Yo sigo vendiendo velas, velones, camándulas, la cuerda para rezar los 33 credos, el incienso de siete potencias, ramas de trigo. Muchas familias han venido a comprarlos, claro, no como los días habituales de Semana Santa, porque esta semana es atípica, pero la tradición se mantiene aun con los templos cerrados”, expresó Yenny Lizarraga, quien desde hace 25 años vende junto a su mamá artículos religiosos a un lado de la Basílica de Táriba.
Recordó que hasta el pasado domingo 5 de abril las puertas de la Basílica permanecieron abiertas por una o dos horas diarias. “Vino la gente a pagar promesas, a rezarle a la Virgen. Yo les vendí muchas velas. Pero desde el lunes de esta semana -6 de abril- ha estado cerrada y para los vecinos de Táriba es muy extraño no poder entrar al templo”, dice mientras arregla los velones blancos en la mesa pintada de azul donde los muestra a sus compradores.
Las autoridades locales han permitido la venta de estos artículos que no son de primera necesidad, solo son religiosos. “No son alimentos, ni víveres, pero sí artículos que ayudan espiritualmente a la paz de las personas. Son nuestras creencias. El Viernes Santos, se rezan los 33credos por la edad de la muerte de Jesús. Han buscado la trenza con los 33 nudos para rezarlos. Eso se hace en casa sin ningún problema, debería ser en familia”, expresa. Recuerda que trabaja entre las 8:00 de la mañana y 12:00 del mediodía.
Este puesto de venta donde hay estampitas con los rostros de muchos santos, imágenes de yeso de santos y santas, camándulas de diversos modelos, velas y velones de varios tamaños, funciona desde hace unos 30 años. “Lo administra mi mamá Gladys Pallares, quien se queda en casa para prevenir cualquier contagio por coronavirus”, aclara.
Muestras de fe
Margarita de Morales compró un velón. “Lo enciendo en el altar que tengo en la casa. Lo meto en un vaso de vidrio grande y lo coloco en un sitio seguro. Es la luz para todos los santos, para Dios y para mis parientes fallecidos”, dice sin ampliar detalles.
Minutos más tarde, Luis Horacio Moncada, se llevó una tira de incienso. “Lo quemamos en casa la mañana del Viernes Santo. Es una tradición de todos los años. En casa para la familia es una jornada como de purificación, de limpieza de la casa y de nuestro cuerpo al respirar ese olor característico de la Semana Santa”, expresa.
Rosario Pernía, llegó al punto de venta de artículos religiosos. “Busco dos trenzas para rezar los 33 credos. Lo haremos en casa el Viernes Santo, con mi esposo y mis hijos. Todos los años veníamos a la Basílica, a las actividades tradicionales, se rezaban los credos y luego se participaba en la procesión. La del Viernes Santo, para mí es la más hermosa”, declara la señora sexagenaria.