Armando Hernandez

Tres jóvenes, entre quienes se encuentra un adolescente de 17 años, que supuestamente se dedicaban al hurto y robo de motocicletas en San Cristóbal, para luego desarmarlas y vender sus partes en dólares, como repuestos usados, fueron apresados por funcionarios del Cicpc durante procedimiento practicado el pasado fin de semana en el Barrio Bolívar, parte alta de la ciudad a donde se desplegaron los detectives por varios días en busca de los sospechosos.

El comisario  Wilmer Uribe Guerrero, jefe de la Delegación estadal Táchira dijo que las investigaciones fueron desarrolladas por funcionarios del Eje Contra el Robo y Hurto de Vehículos de la delegación municipal San Cristóbal, una vez que recibieron denuncia por parte de personas que mediante amenaza de muerte por parte de hombres armados de pistolas, habían sido  despojado de sus motocicletas, en hecho ocurridos en diversos lugares de la ciudad, que fueron tomados en cuenta para hacer una triangulación que permitiera obtener pista sobre los ladrones de motos.

El modus operandi consistía en el robo a mano armada por parte de sujetos que desplazaban en motos, siempre en parejas, y una vez sometían a la victima, el pasajero o “parrillero”, se apoderaba de la maquina y se la llevaban. Los investigadores al analizar esta modalidad establecieron un punto de coincidencia en cuanto a la ruta que utilizaban para escapar, siempre hacia la parte alta de ciudad, concretamente el sector de Pueblo Nuevo, por la avenida Los Agustinos.

Por espacio de varios días se prolongaron las labores de inteligencias e investigaciones de campo, hasta que lograron establecer que en la calle El Alto, de Barrio Bolívar, había un grupo de jóvenes que se dedicaba a la venta de repuestos y partes usadas de motocicletas que eran cotizadas en dólares.

Las investigaciones llevaron a identificar a los sospechosos como J. Y. Lizarazo, de 24 años de edad, apodado “Care e Diablo”, J. E. Zambrano González de 27 años, conocido con el mote de “Cuchin”, y un adolescente de de 17 años, de quien no fueron revelados detalles por razones de carácter estrictamente legal.

Una vez que se  logró obtener la evidencia se procedió a la detención de los tres sospechosos, a quienes se les incautaron dos pistolas, que resultaron ser de juguete, y que al parecer fueron utilizadas para amenazar y someter a las victimas, una ganzúa para moto, y una motocicleta

Marca Sukida, color anaranjado, modelo Jaguar, una pipa y envoltorios de presunta droga.
Dijo el informante que de las investigaciones realizadas por los expertos del Cicpc se ha determinado que los ahora detenidos, se habían convertido en azotes del municipio y se encontraban investigados por el delito de hurto de motos, por lo que fueron colocados a las órdenes de la Fiscalía de Flagrancia del Ministerio Público, en tanto se sigue con las pesquisas para establecer la identidad de otros implicados en el caso.