Pedro A. Parra P
“Al que no sabe para dónde va, cualquier camino le sirve”.
¿Es la política un arte?
“Toda crisis tiene tres cosas: Una solución, una fecha de caducidad, y una enseñanza para nuestras vidas”.
Los momentos constitutivos del saber político práctico, podrían ser:
- Saber qué se quiere.
- Saber qué se puede.
- Saber cómo hay que hacerlo.
- Saber cuándo hay que hacerlo.
Es comprobable en la Historia que la creencia de que el buen gobierno no sólo puede aprenderse sino que puede enseñarse. Así lo prueba el celo puesto en la educación del Príncipe. Sólo que el Príncipe no solo debía tener preceptores escogidos sino también, y sobre todo, el ejemplo del “buen Rey”, y, en parte, el trance formativo podía resumirse en ser o no ser como el padre, ya fuese éste biológico o mero inspirador de conducta.
Voy a hacer uso de este descarnado Manuel del Cardenal Julio Mazarino: ¿Por qué fracasan los políticos?, ya que en él nos vamos a encontrar señalamientos para conseguir el poder y conservarlo; cómo la consecución de los objetivos personales, eclipsa cualquier consideración de orden moral, y simular, disimular, no fiarse de nadie, decir cosas buenas de todo el mundo y, sobre todo, prever antes de actuar.
“Del conocimiento de los hombres, conócete a ti mismo”.
Preguntas, consejos y reflexiones que debería hacerse todo político según el Cardenal Mazarino:
- ¿Estás sujeto a la cólera, al miedo, a la audacia o a cualquier pasión?
- ¿Cuáles son los defectos de tu carácter? ¿Tus errores de comportamiento en la Iglesia, en la mesa, en la conversación, en el juego, en todas las demás actividades, en particular las sociales?
- Examínate físicamente. ¿Tienes la mirada insolente, la rodilla o la nuca demasiado rígida, la frente surcada de arrugas, los labios demasiado finos, los andares demasiado rápidos o demasiado lentos?
- ¿Gozan de buena reputación las personas que frecuentas? ¿Son ricas y prudentes?
- ¿En qué ocasiones puedes llegar a perder el dominio de ti mismo y a cometer errores de lenguaje o de conducta?: Cuándo bebes en el curso de una comida; cuando juegas o, cuando te sucede una desgracia. En esos momentos en los que, como dice Tácito, “las almas de los mortales son vulnerables”
- ¿Sueles ir a lugares sospechosos, vulgares, de mala fama, indignos de ti?
Entonces, ¿Por qué fracasan los políticos?, porque no se han adaptado a los cambios del mundo, se han quedado petrificados en el pasado, con esas enseñanzas que les han llevado a la ruina, y persisten en repetirlas, sin quererse dar cuenta que la mayor parte de lo que ahora constituye la sabiduría convencional sobre política, partidos y las elecciones, ha quedado obsoleta.
“Estamos en una época de transición que ya no es lo que era pero que aún no es lo que va a hacer”.
Es lamentable lo que está pasando en el mundo y, por supuesto, en nuestro país, con los fracasos cada vez más acentuados de los políticos; no hablan cuando debieran hablar; no se unen cuando debieran unirse; el temor los tiene arrinconados y, no tienen valor ni dignidad para protestar y defender los derechos de aquellos que juraron defender. ¡El panorama es poco alentador, pero, la lucha debemos y tenemos que continuarla! .