Una emotiva despedida le brindaron sus compañeros de trabajo en el terminal de pasajeros de La Fría, y aseguran recordarlo como un hombre trabajador, bondadoso y excelente ser humano

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Daniela González

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El COVID-19 cobra la primera víctima en el municipio García de Hevia, zona norte del estado Táchira, un reconocido transportista que dedicó su vida a la familia y al gremio, a quien hoy sus seres queridos y compañeros de trabajo lo recuerdan como un hombre bondadoso, colaborador y de gran corazón.

Miguel Wulfredo Zambrano Varela recién había cumplido 52 años de edad, era apodado, en la población de La Fría, como Candelillo; lo recuerdan desde la adolescencia, porque siempre se movía para todos lados con su luz y su carisma, relató un familiar.

Desde su juventud trabajó en el transporte, y su familia fue parte de los socios fundadores de la línea Jáuregui, “Desde siempre estuvo ligado al transporte; fue un pilar esencial en la familia, siempre pendiente de todos en la casa. Lo que cualquiera necesitara, él siempre estaba ahí para ayudar, estaba para nosotros, una persona muy alegre con la familia, amigos y compañeros de trabajo; fue buen hijo, buen padre, buen amigo y un trabajador incansable, nunca se quedaba quieto”.

Candelillo pasó a formar parte de la lista de víctimas mortales que cobra el COVID-19 en Venezuela, convirtiéndose en el primer fallecido del municipio García de Hevia y de la zona norte del Táchira.

Según datos aportados por un familiar, quien prefirió no revelar su nombre, Miguel Wulfredo Zambrano presentaba enfermedades de base, era diabético y sufría de problemas cardiacos; a pesar de ello, fue un hombre activo, andaba en bicicleta y caminaba a diario.

El panorama de Miguel Wulfredo cambió cuando hace 15 días comenzó a presentar fiebre y malestar general, a pesar de que la prueba rápida dio negativo, una placa de tórax determinó que algo no estaba bien en sus pulmones, por eso tomaron la decisión de trasladarlo al Hospital Central de San Cristóbal, relata el familiar.

Para su familia sucedió lo peor, cuando le anunciaron que Miguel Wulfredo había fallecido a causa de neumonía por COVID-19. Las autoridades aún desconocen el nexo epidemiológico, según les dijeron.

Ante el hecho, Leonardo Contreras, director del Hospital Central de San Cristóbal, anunció el fallecimiento y a su vez explicó que los pacientes fallecidos presentaban enfermedades de base como hipertensión, diabetes y sintomatología respiratoria severa.

De igual forma, fue incluido en las estadísticas anunciadas a nivel nacional. “Se registraron dos fallecimientos, uno de ellos es un masculino de 52 años, residente del municipio García de Hevia, y un masculino de 58 años, del municipio San Cristóbal,” declararon sin aportar mayores datos.

Las autoridades de salud, cumpliendo con los protocolos de seguridad, decidieron cremar a Candelillo y entregar las cenizas a sus familiares.

Candelillo fue trasladado al municipio García de Hevia, donde sus compañeros decidieron brindarle un homenaje en el terminal de pasajeros de La Fría y dar el último adiós al transportista que entregó su vida al gremio.

Daniela González