Regional

Vidas humanas en peligro por derrumbe en carretera de El Molinero

19 de agosto de 2020

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Un deslizamiento se va devorando el tramo de la carretera en el cerro El Molinero, que no solo pone el riesgo la movilidad en el sector, sino la vida de quienes transitan por el lugar.

Hace cuatro años, lo que comenzó como una simple falla de borde, hoy apenas si deja el paso a vehículos y personas, teniendo la suerte que no se desencadenaran males mayores, aunque como informaron vecinos del lugar, este sábado, dos motos chocaron de frente intentando esquivar el bache.

Un bote de aguas blancas, de la tubería que lleva el vital líquido a Tucapé, va a dar a la carretera y la va destruyendo. (Foto/ Freddy Omar Durán)

Pero mientras las autoridades municipales y regionales, que han hecho promesas incumplidas, no han dado importancia al barranco, sí ha sido del gusto de las personas con poca conciencia ciudadana, que arrojan basura allí y propician un banquete a zamuros y perros callejeros.

Cuando llega el invierno, y la crecida corriente de La Zorquera hace de las suyas en las faldas del cerro, el pavimento se resquebraja y ahí se ve la buena tajada que han cobrado las recientes lluvias. Son quince metros de profundidad, por lo que si una persona o vehículo va en caída libre, solo cabe esperar trágicos resultados.

Como afirmó Luis Miguel Molina, los habitantes del sector saben que está fuera de sus manos y presupuestos acometer una obra de gran envergadura para cerrar completamente la brecha que implica el relleno, canalización y habilitación de la vía, entre otras tareas; pero sí se ofrecen a extender cintas de seguridad alrededor de la grieta y levantar a su alrededor una estructura de cemento que contenga las aguas en descenso. Las solicitudes de cemento y granzón ya se han hecho; pero hasta los momentos no han recibido respuesta, y el problema se va agravando.

Otra solución está en liberar la carretera de la otra parte, al otro lado de la que se han apoderado los derrumbes del cerro y la vegetación; pero, en este caso, también se necesitaría del apoyo a través de maquinaria oficial.

Las aguas de lluvia contribuyen a su manera con el trabajo destructivo; pero al mismo se suman los botes provenientes de una de las válvulas a través de las cuales se suministra el vital líquido a Tucapé. Tal escape alimenta una enorme laguna en plena entrada de Zorca-San Isidro, por donde se dificulta el paso a peatones y vehículos. Es visible la límpida corriente, la cual ya los vecinos constataron no proviene de fuente natural alguna.

Freddy Omar Durán