Sucesos
Detenidos una mujer, su hijo y un falso policía durante investigación por robo de moto y extorsión
12 de abril de 2021
Armando Hernández
Una banda que se dedicaba al hurto y robo de vehículos, tipo motocicleta, y que luego extorsionaba a las víctimas, exigiendo el pago de cierta cantidad de dinero, en pesos colombianos, para proceder a su recuperación y posterior entrega, lo cual no ocurría, fue desmantelada por funcionarios del Eje de Investigaciones Contra el Hurto y Robo de Vehículos Automotores, del Cicpc – San Cristóbal, que hasta el momento han logrado la captura de tres personas y prosigue con las investigaciones a fin de establecer si hay otros implicados.
Hurto y extorsión
El comisario general Wílmer Uribe Guerrero, director del Cicpc en el estado Táchira, manifestó que las investigaciones se iniciaron a mediados de la semana pasada, cuando un ciudadano se hace presente en la sede policial para denunciar que en la vía a Cordero, cerca de la estación de servicio conocida como “Las Morochas”, fue hurtada una motocicleta de su propiedad y que luego lo contactó una pareja que le dijo tener conocimiento de lo ocurrido. Le explicaron que tenían un amigo en las FAES que podía recuperar la moto, a cambio de una contribución de 300 mil pesos colombianos.
La víctima, un comerciante de nacionalidad venezolana y 22 años, comentó a los detectives que, esperanzado por las promesas de la desconocida pareja, se abstuvo de presentar denuncia ante las autoridades policiales. El robo de su motocicleta, marca Bera, modelo BR-150, roja, placa AF3T02U, ocurrió el domingo 4 de abril, en horas de la mañana, y poco después fue abordado por la pareja, con la cual se acordó todo lo relacionado al pago por la recuperación del vehículo de dos ruedas.
Dijo el comerciante que, pasadas algunas horas, la mujer lo llamó para informarle que el supuesto funcionarios de las FAES había recuperado la motocicleta y la tenía en su poder, al tiempo que vía wasap le hizo llegar algunas fotografías. Poco después fue el individuo, quien se identificó como Fernández, quien lo contactó para finiquitar el pago de los 300 mil pesos. Acordaron un sitio de reunión, a donde debía ir con Omar, el acompañante de la mujer. Contrariamente a lo que el comerciante esperaba, el hombre llegó sin la motocicleta y para tranquilizarlo, este le dijo que eran razones de seguridad y más tarde la dejaría en la casa de la mujer que había servido de contacto, y le avisaría para que pasara a retirarla.
El comerciante, ilusamente entregó el dinero y esperó que lo llamaran, pero eso nunca ocurrió. A partir de ese momento perdió todo tipo de contacto con las personas involucradas, ya que no respondían los celulares.
Investigación policial
El comisario Uribe Guerrero dijo que el miércoles 7 del mes en curso, en la sede del Cicpc se recibió la denuncia sobre lo ocurrido y de inmediato se iniciaron las investigaciones. Una comisión del Eje Contra el Robo y Hurto de Vehículos se trasladó hasta la zona donde ocurrió el hurto de la motocicleta, a fin de hacer una inspección del lugar. Un detalle captado durante la conversación con el denunciante llamó la atención de los detectives, que no se explicaban cómo la pareja que lo contactó tenía conocimiento del robo, si este no le había comentado nada a nadie. Consideraron que, en definitiva, el lugar del hurto era clave para la investigación, así que dispusieron una vigilancia discreta de la zona que les permitió detectar la presencia de una pareja, cuyas características coincidían con los datos aportados por el agraviado.
Se trataba de una mujer y su hijo, a quienes identificaron como María Eugenia L. S, de 56 años de edad, oficios del hogar, y Carlos Eduardo, de 19 años de edad, quienes fueron trasladados a la sede del Cicpc para ser investigados. Las pesquisas permitieron establecer que el tercer individuo respondía al nombre de J. J. Fernández Yépez, de nacionalidad venezolana, de 25 años de edad, conocido con el apodo de Virolo, y no era funcionario de las FAES ni de ningún organismo de seguridad. Este sujeto presenta registro policial, de fecha 4 de mayo del 2020, ante el Eje de Vehículos del estado Táchira, por el delito de robo de vehículo automotor.
Los detectives fueron tras él y al seguirle la pista lograron ubicarlo en una estación de servicio ubicada en la avenida Marginal del Torbes, donde resultó aprehendido.
El jefe policial dijo que durante la investigación fue retenida una motocicleta, marca Keeway, modelo Speed, color negro; cuatro teléfonos celulares, entre los cuales están los aparatos utilizados para establecer contacto con la víctima de la extorsión; dos pasamontañas, un chaleco de color verde, de uso militar; una pistolera de uso policial, y prendas de vestir de diferentes tallas y colores.
Añadió que en las investigaciones se pudo establecer que los sospechosos al parecer forman parte de una banda dedicada al hurto y robo de vehículos, tipo motocicletas, que operaba en San Cristóbal y sectores del municipio Cárdenas, donde se aprovechaba de la buena fe y credibilidad de las víctimas, a quienes ofrecían la recuperación del vehículo robado a cambio del pago de cierta cantidad de dinero, en pesos colombianos.
La moto robada al comerciante no aparece por lado alguno y las autoridades prosiguen su búsqueda, en el marco de una investigación que se mantiene en desarrollo para establecer la vinculación o no de las personas detenidas con hechos similares, al tiempo que se indaga sobre otras personas vinculadas a esos hechos.