Política
Con plan coordinado resuelven en el Terminal la crisis por contaminación y falta de unidades
27 de diciembre de 2017
La crisis denunciada en el Terminal de Pasajeros de San Cristóbal, sobre la contaminación generada por el desaseo y la basura sin recoger, la falta de unidades de transporte, además de la exigencia de efectivo para comprar los boletos para viajar, e incluso el viaje expreso a Cúcuta que tienen -o tenían(?)- que realizar venezolanos para comprar la divisa venezolana a fin de poder movilizarse en el suelo nacional, fue resuelta en dos días, en un plan conjunto del Ministerio del Interior, Justicia y Paz, que encabeza la Policía Nacional a través de su comandante, coronel Cristián Morales, con el apoyo de la Alcaldía de San Cristóbal y el alcalde electo, Gustavo Delgado.
Esa emergencia tuvo su clímax el viernes, en la noche, cuando pasajeros que se dirigían al centro del país, al no ver unidades en el terminal y sin nadie que les resolviera su necesidad de viajar, agarraron la basura y lo que consiguieron y lo tiraban, dejando al conocido principal puerto terrestre del Táchira vuelto un caos; incluso, aunque no hay una versión oficial sobre el particular, usuarios dicen que comenzaron a secuestrar unidades con destino al centro de país; de hecho, los conductores del transporte extraurbano, el sábado en la mañana, dejaron a los pasajeros en las afueras del Terminal, argumentando que en el interior estaban secuestrando unidades.
Este martes, una comisión, integrada por el coronel Morales, además del alcalde electo, Gustavo Delgado, y personeros de la Guardia Nacional, la Policía Municipal y la Policía del Estado, además de los directores General, Servicios Públicos, Policía e Infraestructura de la Alcaldía, Iván Luengas, Israel Ruiz, Ángel Perdomo y Raúl Moreno, respectivamente, se dieron cita en el Terminal para inspeccionar las salidas, mejorar la seguridad, hacer seguimiento al plan especial de limpieza que iniciaron el sábado con el apoyo de la Fuerza Armada y Bomberos, y garantizar un plan de contingencia para viajar el fin de año, para lo cual se reunieron con representantes del transporte extraurbano, entre otros, Freddy Bayte y Freddy Muñoz.
La cita con los transportistas fue en la sede de Expresos Barinas y distendida, con la ausencia inicial de los representantes de la Sundee, a quienes los transportistas pedían el pasaje al menos a 200 mil bolívares, y no a 170 mil, como lo redujeron el viernes y que, según manifestaron los voceros de las empresas que hacen vida en el Terminal, eso fue lo que desembocó en la falta de unidades, pues prefirieron llevarlas a otros destinos, donde el pasaje lo podían vender más caro.
Sin transporte el 31-D
Los transportistas indicaron que, mientras les garanticen el gasoil, ellos activan el plan de contingencia para el viaje al centro del país, hasta el treinta de diciembre, aunque con menos unidades, por cuanto el treinta y uno es el único día que no prestarán servicio; lo seguirán prestando el primero, también con menos unidades.
Las autoridades plantearon el tema del efectivo, denunciado incluso durante el recorrido, y los transportistas afirmaron que lo único que no reciben son tarjetas de crédito, pues cobran los pasajes por punto, con tarjeta de débito e incluso con transferencia; asimismo, que también cobran en efectivo, por cuanto para comprar un caucho, que vale veinte millones de bolívares, les exigen que lo paguen en efectivo.
Los transportistas también realizaron sus exigencias y, entre otras cosas, pidieron la presencia de la Sundee para ver si podían llevarlo a 200 mil bolívares pero alguien de la reunión afirmó que el ministro había propuesto 250 mil bolívares. Asimismo, pidieron la organización y demarcación de las pistas, por cuanto en este momento los autobuses los comparten con busetas que tienen ocupados los puestos de estacionamiento cuando van a cargar pasajeros. Indicaron que compraron pintura de tráfico para que demarcaran los escalafones y cuando fueron a entregarla, no se las recibieron y les informaron que habían contratado a una empresa.
Por otra parte, ante la falta de cestas para que los usuarios echen la basura, el alcalde electo les pidió la colaboración con cestas, a lo cual se comprometieron para contribuir a mantener el Terminal limpio.
En cuanto al tema de la seguridad, el coronel Morales informó que los diferentes cuerpos de seguridad, incluido el Cicpc, estarían garantizándola. Las autoridades también manifestaron que iban a restringir la presencia buhoneril, que al igual que los kioscos que están construyendo, es rechazada por los comerciantes formales del Terminal y los mismos transportistas, según manifestaron. De allí que anunciaron que investigan el tema de esos locales en construcción, que según los usuarios llevó a la tala de bosque en ese recinto.
Gestión iniciada en el Terminal
Por su parte, el nuevo burgomaestre afirmó que “hoy se inicia la coordinación con entes como el Gobierno nacional y regional, para tener una gestión eficiente y la estamos iniciando con el Terminal de Pasajeros”.
Indicó que “vamos a garantizar el transporte, para que no suceda una situación de desorden público, como la del viernes, cuando más de seis mil pasajeros se quedaron varados, pero gracias al apoyo del general Reverol, el general Pinto y el coronel Morales, se pudo canalizar con diferentes empresas y se habilitaron unidades de transporte”.
De allí que Delgado manifestó que cumplieron lo que se propusieron: controlar la situación en el Terminal.
Denuncias por efectivo
y tercera edad
Durante el recorrido, varias personas, como Julio Villasmil, se acercaron a hacer denuncias de presuntas irregularidades, como “el desespero de la gente por el efectivo: usted va ahí y no hay un punto o los tienen guardados, para después irse a vender el efectivo. La gente está yendo a Cúcuta a comprar efectivo porque no le venden los pasajes con tarjeta; tengo dos familiares que vinieron a comprar pasaje para Barquisimeto y no se los quisieron vender, si no era con efectivo, en Global Express y en Expresos Unidos; tuvieron que dejar la maleta con un muchacho, mientras venía a cuidarlas, y en Cúcuta les dijeron que con transferencia, por 180 mil bolívares, piden 250 mil; ellos allá se están quedando con una ganancia; los venezolanos estamos comprando en Cúcuta el bolívar, para poder movernos en nuestro propio país”.
Otra ciudadana destacó que “en las casas de cambio en Cúcuta usted ve las rumas de billetes de aquí, y la gente va a comprar el efectivo allá, por transferencia”.
Por su parte, Iván Valencia consideró que la gente de la tercera edad, discapacitados y menores de tres años, necesitan una oficina, porque no hacen cumplir la gaceta que establece que solo pagan medio pasaje.
Marina Sandoval Villamizar