El huracán Irma, que el fin de semana azotó Cuba antes de seguir hacia Florida (Estados Unidos), causó 10 muertos en provincias de la isla, informó este lunes Cubadebate, que reproduce en su sitio web un boletín de la Defensa civil cubana.
«Después del paso del peligroso huracán Irma por el territorio nacional se han reportado hasta el momento la pérdida de diez vidas humanas, en los territorios de La Habana, Matanzas, Camagüey y Ciego de Ávila», anunció la Defensa civil en un comunicado, reseñó AFP.
Siete de las muertes ocurrieron en La Habana, cuatro hombres y tres mujeres. Otros tres hombres de 65, 53 y 64 años de edad murieron en las provincias de Matanzas (occidente), Ciego de Avila (centro) y Camagüey (oriente), al desplomarse sobre ellos sus casas.
En La Habana, un hombre de 71 años murió electrocutado por un cable eléctrico caído, mientras intentaba retirar su antena de televisión. Otro de 77 años murió aplastado por un poste eléctrico derribado por el viento.
Un balcón de un cuarto piso en el deteriorado barrio de Centro Habana se desplomó desde esa altura por el empuje de los vientos, cayendo sobre un ómnibus y matando a dos mujeres de 27 años que viajaban en él.
Otros hombres de 54 y 51 años murieron al derribarse el techo de una casa, también en Centro Habana, mientras que una anciana de 89 años fue encontrada flotando en el agua en el interior de su casa, muy cerca del malecón.
Irma se convirtió así en el tercer huracán que más muertos provoca en Cuba entre los que han azotado la isla en lo que va de siglo, superado por Dennis, que en julio de 2005 dejó 17 muertos y Sandy, en octubre de 2012, con 11.
El presidente Raúl Castro reconoció este lunes que «han sido días duros» para Cuba y su población.
Irma «causó severos daños al país, los cuales, justamente por su envergadura, aún no se han podido cuantificar. Una mirada preliminar evidencia afectaciones en la vivienda, el sistema electroenergético y la agricultura», dijo Castro en un texto publicado en el diario oficial Granma.
El mandatario reconoció que «son muchas las muestras de solidaridad recibidas desde todas partes del mundo» y dijo también que es tiempo «para volver a construir lo que los vientos del huracán Irma intentaron desaparecer».