Internacional
Rechaza candidato izquierdista Pedro Castillo llamados de la derecha a anular elecciones en Perú
16 de junio de 2021
Lima, Perú | AFP |El candidato presidencial izquierdista Pedro Castillo, que encabeza el lento escrutinio en Perú, rechazó este martes los llamados a anular las elecciones por supuesto fraude, formulados por políticos de derecha que apoyan a la candidata Keiko Fujimori.
«Se sigue llamando a tumbarse una elección», dijo Castillo a corresponsales de prensa extranjera en la sede de su partido en Lima.
El profesor rural agregó que estaban «pacientes, esperando un resultado», en alusión al trabajo del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), dijo en una comparecencia donde no aceptó preguntas de los periodistas.
Este tribunal electoral está revisando las impugnaciones antes de proclamar un ganador nueve días después de los comicios, que contaron con el 74,5 % de participación y en los que los observadores de la OEA dijeron que no hubo «graves irregularidades».
«La democracia tiene reglas y plazos que todos debemos respetar», declaró el cardenal Pedro Barreto este martes al canal RPP sobre los llamados a anular los comicios, y dijo que la Iglesia católica «está disponible» para mediar con el fin de superar la «dolorosa y frustrante incertidumbre» que vive el país.
Fujimori, que denuncia «fraude» y ha pedido anular miles de votos, solicitó además una «auditoría informática» al órgano electoral (ONPE), mientras el JNE revisa las impugnaciones presentadas por cada bando, principalmente por ella.
Ambos órganos electorales están bajo fuego de los sectores más radicales que apoyan a Fujimori, que temen que la revisión de las impugnaciones por parte del JNE no impida un triunfo del maestro de escuela rural izquierdista.
La ONPE organiza los comicios y cuenta los votos, mientras que el JNE resuelve las impugnaciones y proclama al ganador oficial.
La imparcialidad de ambos organismos autónomos ha sido avalada por los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA), que dijeron que la votación del 6 de junio fue limpia, sin «graves irregularidades».