La Fiscalía brasileña instauró este viernes una investigación sobre acusaciones formuladas contra el presidente Jair Bolsonaro, por sospechas de que no denunció una tentativa de corrupción en la compra de la vacuna india anticovid, Covaxin.
“En una notificación registrada este viernes por la mañana, la Fiscalía General de la República (PGR) informó al Supremo Tribunal Federal (STF) de la instauración de una investigación sobre los hechos denunciados” por tres senadores, que acusaron a Bolsonaro de prevaricación, indicó la Fiscalía en un comunicado.
Para dar los primeros pasos de la investigación, el vicefiscal general, Humberto Jacques de Medeiros, solicita la autorización de la jueza de la corte suprema Rosa Weber para pedir informaciones sobre el caso “y el eventual envío de pruebas” recogidas por otros organismos judiciales y legislativos.
Tres senadores presentaron el lunes pasado una demanda ante la corte suprema para investigar si Bolsonaro incurrió en el delito de “prevaricación” al no denunciar la presunta sobrefacturación en la compra de la vacuna Covaxin, del laboratorio Bharat Biotech, que al final no se realizó.
La factura de 45 millones de dólares, por tres millones de dosis, aterrizó el 18 de marzo en el escritorio de Luis Ricardo Miranda, jefe de importaciones médicas del Ministerio de Salud, quien transmitió sus dudas a su hermano, el diputado bolsonarista Luis Miranda.
Según los hermanos Miranda, Bolsonaro los recibió el 20 de marzo en su residencia en Brasilia y les aseguró que comunicaría esas sospechas a la Policía Federal, algo que aparentemente nunca hizo.
Entre los tres legisladores que pidieron accionar al STF figura Randolfe Rodrigues, vicepresidente de la Comisión Parlamentaria (CPI) que indaga en presuntas omisiones del gobierno en la lucha contra la pandemia que ya dejó más de medio millón de muertos en Brasil.