Júbilo en la comunidad del estado Táchira y especialmente en el municipio Guásimos, Palmira, asiento de diferentes congregaciones religiosas porque este diez de julio un hijo de su terruño recibió la ordenación diaconal.
Se trata del acólito Omar Alejandro Porras Becerra, quien junto con el acólito Carlos Palmar fueron ordenados Diáconos este sábado en misa solemne en la capital del país.
La celebración de la Eucaristía Solemne de imposición de manos y la oración consacratoria que pide a Dios la efusión del Espíritu Santo, estuvo a cargo del Excmo. Monseñor Benito Adán Méndez Bracamonte, Obispo Castrense de Venezuela, en ritual celebrado en la Parroquia Santa Rosa de Lima, Distrito Capital, Caracas, este sábado a las 10:00 Am.
De ahora en adelante estos dos hijos de Dios, Omar Alejandro Porras y Carlos Palmar, visten la dalmática que lleva sobre el alba o la estola como insignia sagrada o túnica blanca que ciñe a la cintura con el cíngulo o cordón adornado con borlas. También recibieron los Evangelios, la patena y el cáliz. También participarán de las tres funciones de enseñar, santificar y gobernar según su jerarquía eclesiástica.
Es preciso recordar el vínculo familiar con el VI Arzobispo de la Arquidiócesis de Mérida Monseñor Baltazar Enrique Porras Cardozo y del extinto y siempre querido y recordado Monseñor José Hernán Sánchez Porras, nativo de Palmira y quien ejerció como capellán general y obispo de los componentes castrenses. (Elsa Carrillo)