La Vinotinto con la ilusión de alcanzar al menos un empate ante el gigante del continente. A las 7 y 30 de la noche se pondrá a rodar el balón en el gramado del estadio Olímpico.
Homero Duarte Corona
Un partido Venezuela-Brasil, en casa o de visitante huele a “Crónica de una muerte anunciada”, es casi una derrota segura en contra de los intereses del seleccionado patrio. Ahondar en el tema, ir al génesis del historial de los antagonistas que esta noche se verán las caras en el remozado estadio Olímpico de la Ciudad Universitaria de Caracas, es redundar, repetir algo que todo el mundo conoce.
La distancia futbolística entre Venezuela y Brasil raya en lo insólito, no hay comparación: el gigante país suramericano lo ha ganado todo en el mundo del fútbol; la otra nación de los petrodólares no ha ganado nada, muy poco, al extremo que ni siquiera ha podido asistir a una Copa Mundo, única del continente .
Una nueva cita premundialista
El choque de hoy encuentra a los dos rivales en los extremos de la tabla; el forastero es líder solitario con números perfectos de 8-8, para 24 puntos, aún no conoce la amarga hiel de la derrota; la antítesis, el anfitrión conjunto nacional apenas suma 4 unidades, producto de un triunfo y un empate, prácticamente eliminado en su objetivo de lograr un cupo para la justa universal asiática en Catar 2022.
Pensar en un triunfo Vinotinto para una luz de esperanza al final del túnel resulta utópico, y no se trata de minimizar a la selección nacional, sino la realidad, el sopesar hombre a hombre de cada uno de los equipos, hay una diferencia abismal, no tiene comparación.
Los progresos del fútbol venezolano son innegables, una buena cantidad de jugadores haciendo campaña en importantes clubes de América y Europa, no ahora sino hace algunos años; sin embargo todavía se está distante para codearse con un país futbolero por excelencia, muchos títulos en el concierto universal, sobresaliendo las cinco coronas mundiales.
Ante este panorama el más pesimista diría: “entonces para que jugar, apague la luz y vámonos, para que jugar y si ya el partido está perdido desde antes de jugar”.
También se puede apelar a la frase de: la imbatibilidad no existe. No obstante en este caso, son los hechos los que ponen de manifiesto que la “verde amarela” ahora mismo no tiene con quien perder en la eliminatoria Sudamericana, al menos hasta el momento, ocho triunfos en fila.
Para colmo de males, La Vinotinto no está en su mejor momento; a los malos resultados, todo por un comienzo tambaleante ante la renuncia del cuerpo técnico comando por Rafael Dudamel, luego la presencia de un nuevo cuerpo técnico a una semana del inicio de la eliminatoria, que tuvo un paso fugaz por incumpliendo en el pago de sus honorarios a José Peseiro por parte de la Federación Venezolana de Fútbol agravó aún más la situación, el hundimiento de la Seleccion en el foso de la tabla de posiciones.
“Dios proveerá”
Frase que se le podría acuñar al director técnico inferíamos Leonardo González, que ya le advirtió a la Federación Venezolana de Fútbol, a su presidente Jorge Jiménez, que si no lo “nombran fijo” para lo que resta de la eliminatoria no seguirá al frente de la selección.
El porqué Dios proveerá, sencillamente por lo que representa el partido ante Brasil, que así juegue con la banca o con cualquier grupo de jugadores de la Liga de su país, tiene con que enfrentar con éxito la eliminatoria Sudamericana.
Es verdad que los jugadores que coloque en el once titular Leonardo González, son profesionales a carta cabal, que sienten y sudan la casaca Vinotinto en el campo de juego; sin embargo, en la realidad, el rival que estará al frente e independientemente no estén en la titularidad su estrella Neymar Júnior y Casemiro, tiene sustitutos o relevos de calidad para suplir con creces a sus colegas ausentes.
El técnico Títe, sin misterios, el mismo miércoles luego del arribo a Caracas, procedente de Bogotá, dio a conocer la alineación oficial o titular para el partido de este jueves a las 7 y 30 de la noche; Alinson; Danilo, Marquinhos, Thiago Silva, Guilarme Araña; Fabinho, Everton Ribeiro, Gerson y Lucas Paquetá; Gabigol y Gabriel Jesús.
En la rueda de prensa del técnico Leonardo González, este no asomó una posible alineación titular, sin embargo, y ante la ausencia de jugadores tan importantes, casos Salomón Rondón, máximo artillero de la Vinotinto, Josef Martínez, Yorman Martínez, Yangel Herrera y Jefferson Savarino, todos titulares indiscutibles, el cuerpo técnico recurrirá a los jugadores convocados, tanto legionarios como de la Liga local.
Un posible once abridor del seleccionado nacional; Fariñez; Rosales, Camcellor, Ferraresi, O. González; “Brujo” Martínez, Rincón, Soteldo, Machís; Aristiguieta y Córdoba. Un peruano será el árbitro central, Kevin Ortega.