Este sábado, el Líbano se quedó sin suministro eléctrico público después de que dos plantas de energía dejaron de operar en las últimas 24 horas por falta de combustible, apagando del todo este servicio que venía proporcionando solo una o dos horas de luz cada día a los hogares.
El cese de operaciones en las plantas de Deir Amar (norte) y Zahrani (sur) hizo disminuir el suministro a menos de 270 megavatios y, en consecuencia, la red «al completo» dejó de funcionar, informó la compañía eléctrica estatal, Electricité du Liban (EDL), según la Agencia Nacional de Noticias.
Según un funcionario del gobierno las dos centrales eléctricas habían cerrado debido a la escasez de combustible.
La red eléctrica «dejó de funcionar por completo hoy al mediodía» y es poco probable que se reinicie durante varios días, añadió.
Desde hace varios meses, el suministro eléctrico público ha sido muy limitado, por lo que la población depende de la contratación de generadores privados, también operados con combustible y cuyo precio se ha disparado por la escasez generalizada de carburantes.
La gente recibía por lo general solo dos horas de electricidad al día antes de este último apagón.
Durante los últimos 18 meses, Líbano ha atravesado una grave crisis económica que ha empeorado en medio de una escasez de combustible.
La crisis ha dejado a la mitad de su población en la pobreza, la moneda del país también ha sufrido y todo esto ha generado una serie de importantes manifestaciones contra la clase política.
Mantener los generadores privados que funcionan con diésel se han vuelto cada vez más costoso en medio de la escasez de combustible, lo que tampoco permite cubrir la falta de una red eléctrica a nivel nacional.
Aún no se reponen de la explosión de Beirut
El país también está lidiando con las secuelas de la explosión de Beirut en agosto de 2020, que mató a 219 personas e hirió a otras 7.000.
Tras la explosión el gobierno dimitió, dejando al país en una parálisis política. Najib Mikati se convirtió en primer ministro en septiembre, más de un año después de que renunciara el gobierno anterior.
El mes pasado, el grupo militante Hezbolá trajo combustible iraní al país para aliviar la escasez. Sus oponentes dicen que el grupo está utilizando el suministro de combustible para expandir su influencia.
RZ con información de portales web