El as argentino rescató al club parisino luego de anotar par de goles ante el Leipzig
Paris, Francia | AFP |
Leo Messi, que había llegado al París Saint Germain como el salvador del equipo francés para la ansiada Liga de Campeones, cumplió su papel este martes ante el Leipzig. Un doblete del argentino en la segunda parte, cuando su equipo iba perdiendo, permitió la remontada de los suyos (3-2) en el Parque de los Príncipes.
El PSG se había adelantado al inicio de partido por medio de Kylian Mbappé (9), pero el Leipzig, apenas octavo en la Bundesliga y con cero puntos tras tres jornadas del Grupo A de Champions, se aprovechó de las bajas de su rival para darle la vuelta al partido con tantos del portugués André Silva (28) y del francés Nordi Mukiele (57).
Pero ahí apareció Messi, que ya había anotado en el triunfo en la segunda jornada con el Manchester City (2-0), con dos tantos, primero al rematar en dos tiempos un centro de Mbappé (67) y después al convertir un penal (74).
Messi pudo incluso haber logrado un triplete, ya que el árbitro, con ayuda del VAR, señaló un nuevo penal en el descuento por falta al marroquí Achraf Hakimi, pero Mbappé fue el encargado de lanzarlo y el balón se fue por encima del larguero (90+2).
Pese a ese error, la aportación de Mbappé en el partido fue importante, en un duelo en que su equipo acusó las bajas de los lesionados Neymar y Leandro Paredes, y del suspendido Ángel Di María
El delantero francés, además de anotar el primer tanto, dio la asistencia en el segundo y provocó el penal en el tercero, cometido por el francés Mohamed Simakan.
«La suerte no existe en este tipo de partidos. Ha habido períodos durante nuestro partido más débiles», afirmó Mbappé.
Sobre el primer penal, que dejó tirar a Messi, el jugador francés afirmó que «es normal, es el mejor jugador del mundo y siempre he dicho que es un privilegio que juegue con nosotros. El primero lo debe tirar él. Me dejó el segundo y lo fallé».
PSG sigue líder
Con este triunfo, el PSG conserva el liderato del Grupo A después de tres fechas, con siete puntos, uno más que el Manchester City, que goleó 5-1 como visitante al Brujas, tercero, con cuatro unidades, mientras el Leipzig lleva cero.
El equipo alemán llegaba al Parque de los Príncipes con derrotas en las dos primeras jornadas, por lo que parecía una víctima propiciatoria para un millonario PSG, que tenía bajas importantes.
El Leipzig anunció desde el principio que iba a plantar cara al partido. Y tras dos buenas intervenciones de Keylor Navas en esos primeros minutos, sería curiosamente el PSG el que anotaría en un contragolpe, en el minuto 9, gracias a una gran jugada personal del Mbappé.
El alemán Julian Draxler, sustituto del lesionado Neymar en el ataque del PSG, tocó para Mbappé, que en una gran acción individual por la izquierda, batió por raso al portero húngaro Peter Gulacsi.
El primer gol de Mbappé en esta Liga de Campeones sirvió al delantero francés para congraciarse ante una parte de la afición del PSG, que le había recibido con silbidos en los primeros partidos de la temporada por sus presuntos flirteos con el Real Madrid.
Mbappé muy activo
El PSG no llevó más peligro en la primera media hora. Navas, preferido al italiano Gianluigi Donnaruma en la portería, muy exigido en esa primera mitad, vio como el Leipzig disparaba al poste por medio del portugués André Silva en el minuto 26.
Era un anuncio de que el Leipzig, que llevaba mucho más peligro, estaba cerca del empate.
Y la igualada llegó dos minutos después con una internada por la izquierda del lateral español Angeliño, que remató un muy activo André Silva a la red (28).
El inicio de la segunda mitad, sin que el equipo francés llevara peligro.
De este modo, el Leipzig volvió a encontrar petróleo en otro centro de Angeliño desde la izquierda, que remató esta vez a las mallas el francés Nordi Mukiele (57).
Pochettino reaccionó y dio entrada a la hora de juego en el centro del campo al portugués Danilo y al holandés Georginio Wijnaldum.
Y siete minutos después llegó el gol del empate de Messi, tras un robo de balón en el centro del campo, que acabó con centro de Mbappé dentro del área, para que el argentino rematara al poste, recogiera el rebote y empujara el balón dentro de la portería (67).
Después llegaría la apoteosis al anotar un penal al estilo Panenka (74).