(AFP)Un pedido de perdón por el “daño irreparable” cometido por ministros de la iglesia que abusaron sexualmente de niños y una multitudinaria misa, opacada por protestas y quema de iglesias, marcaron la primera jornada de actividades de Francisco en Chile, este martes.

La pederastia, un tema ineludible

A fuerza de protestas, el abuso sexual a menores dentro de la Iglesia se coló en la visita y Francisco respondió con un escueto mea culpa. El prelado argentino manifestó su “vergüenza” por los casos de pederastia frente a la presidenta Michelle Bachelet en La Moneda, pero el gesto fue insuficiente para sus detractores.

“No sirve el perdón, la vergüenza y el dolor si no viene con las acciones correspondientes”, publicó Juan Andrés Murillo, activista contra el abuso y uno de los denunciantes en 2010 de un caso emblemático en Chile que se desató cuando varios hombres denunciaron haber sido abusados en su juventud por el poderoso sacerdote Fernando Karadima, condenado por el Vaticano a “una vida de oración y penitencia”

Escalada de protestas

Las protestas contra el papa se desplegaron por varias calles de Santiago este martes.

“Francisco: cómplice de crímenes pedófilos” y otros mensajes cuestionando la reacción del papa ante los abusos dentro de su iglesia pusieron el tono a las protestas, que en varios casos terminaron con fuertes enfrentamientos entre manifestantes y la policía.

Cerca de medio centenar de detenidos e imágenes confirmaron la presunción del Vaticano, que antes de la llegada de Francisco a Chile adelantó que la sexta gira por Latinoamérica del pontífice sería una de las más complejas de su gestión.

 Iglesias quemadas

A las protestas callejeras se sumaron en las últimas horas tres nuevos ataques a iglesias, uno en la comuna de Santiago -con daños menores- y dos en La Araucanía (sur), que consumieron dos humildes capillas.

Estos ataques se suman a otros cinco ocurridos el pasado fin de semana, atribuidos por las autoridades locales a grupos anarquistas.

 

 Sonrisas con Bachelet, distancia con Piñera

Junto a la presidenta saliente Michelle Bachelet y entre risas, Francisco recorrió la alfombra roja extendida en su honor en la sede del gobierno chileno, La Moneda. Minutos después, con semblante serio saludó al presidente electo Sebastián Piñera y le entregó al magnate un regalo, cumpliendo con el protocolo.

El obispo más longevo del mundo

Bernardino Piñera, el tío del presidente electo chileno Sebastián Piñera, fue homenajeado por el papa por ser el obispo más longevo del mundo, tanto en edad (102 años) como de obispado (60 años), durante una reunión con las altas autoridades del clero chileno en la catedral de Santiago.

Piñera es en la actualidad arzobispo emérito de La Serena (norte).

 

Compendio: María Teresa Amaya/coordinadora de noticias internacionales/Diario La Nación