LA RENUNCIA es el acto por el cual una persona manifiesta su voluntad de descontinuar, permanente o temporalmente, el goce de un derecho o de extinguir cualquier tipo de vínculo con una actividad o un medio. Es la resignación, de forma voluntaria, de insistir en un puesto o al logro de cualquier ambición…AL PARECER, en nuestro medio, esta definición ha sido borrada del diccionario de nuestros políticos, en donde los que han perdido en sus apetitos lucen enconchados, sin dar explicación alguna o a lo mejor esperando el momento oportuno para salir campantes a dar cualquier explicación de sus derrotas…NOS VIENEN A la memoria estas actitudes diferentes tomadas por dirigentes en otros países, por ejemplo España, en donde el fundador y líder del Partido Ciudadanos, Albert Rivera, tras haber perdido un proceso electoral y arrinconado al tercer o cuarto puesto de las agrupaciones partidistas de la península ibérica, no solo dejó su cargo de secretario nacional, sino que se alejó totalmente de la política…OTRO TANTO hizo el fundador del partido Podemos, Pablo Iglesias, quien tras haber sido vicepresidente del gobierno se lanzó a la conquista de la ciudad autonómica de Madrid, perdió estrepitosamente, renunció y se alejó de su partido y de la política…AQUÍ, TANTO a los dirigentes del gobierno, como de la oposición, sus fracasos no les dicen nada, pues más bien se atornillan en sus puestos, esperan que baje la marea y luego emergen a la palestra como si nada les hubiese sucedido…IGUALES CASOS de abandonar el poder se han visto en el Reino Unido, en donde el primer ministro anterior al actual, por haber perdido en su posición frente a la ruptura con la Unión Europea, entregó de inmediato su carta de dimisión al no haber logrado sus metas…DENTRO DE cuatro años, estaremos nuevamente ante la convocatoria de elecciones regionales y nacionales, y ya vislumbramos que las mismas caras que fueron derrotadas este año estarán, con su rostro bien lavado, pidiendo el voto de los ciudadanos, que a lo mejor creen que padecen de amnesia colectiva o de Alzheimer permanente…Y AQUELLO de pedir la renuncia pública a funcionarios incapaces, en nuestro medio, es como orar en el desierto, con la seguridad de que nadie les va a escuchar, pues cuando se saborean los deleites del poder, es muy difícil que se dejen esas mieles, por más incapaces que seamos…LA RENUNCIA política de quienes se creyeron salvadores del Táchira y se lanzaron a ciegas pidiendo el voto, que para unos 3.500 cargos fueron casi 70 mil, deberían ya verse en el espejo en estos días de reflexión, pero qué va, eso solo lo experimentaremos en otra galaxia, menos en la nuestra.

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Y ESTO, es todo por hoy

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MENTIRAS universales:

“Volveremos y venceremos”

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DIOS los bendiga…¿Saben?

VÍCTOR MATOS