La tranquilidad regresó a la frontera y sobre todo a las zonas cercanas a las trochas y puente internacional Simón Bolívar, tras la balacera que se registró este lunes, en horas de la noche.

El enfrentamiento entre grupos irregulares — trascendió que fue entre el ELN y el Tren de Aragua–, duró aproximadamente 30 minutos, lo que avivó el pánico entre quienes regresaban a Venezuela, a esa hora, por el tramo binacional o se hallaban cerca de las trochas.

Decenas de ciudadanos se tiraron al asfalto y acera del puente para protegerse de una bala perdida. Los gritos, en algunas ocasiones, reflejaban el temor que reinaba.

Hacia el barrio Lagunitas, en San Antonio del Táchira, vecinos, transeúntes y trabajadores informales, se vieron en la obligación de resguardarse pues la balacera se escuchaba cerca de la trocha La Siete.

En La Parada, la situación fue similar. La gente corría arropada por el miedo que generaban las fuertes detonaciones.

Jonathan Maldonado