Héctor José Lozano, de 58 años, vivía en la parroquia El Palotal, en el municipio Bolívar
Por Jonathan Maldonado
Héctor José Lozano, de 58 años, falleció bajo el «amparo» de la soledad. Sus familiares, según vecinos, vivían en Bogotá, Colombia, razón por la que nadie pudo auxiliarlo en el momento en el que un aparente infarto fulminó su existencia.
Lozano era muy popular en su zona. Le decían ‘sancocho de pata’ y residía en la calle 5 de la parroquia El Palotal, en el municipio Bolívar. Los lugareños más cercanos le ayudaban, en muchas ocasiones, con su alimentación.
«Últimamente, él no hacía nada, solo caminaba por las calles de la parroquia», precisó un vecino. El no verlo, desde este miércoles al mediodía, por el sector, levantó sospechas en la comunidad.
Las dudas sobre qué le había sucedido al quincuagenario se disiparon una vez su amigo, quien le colaboraba con el almuerzo, acudió este jueves a su casa, de una fachada color azul, algo desvencijada por el tiempo.
Al tocar la puerta y ver que nadie abría, se atrevió a entrar y lo halló sin signos vitales en el baño de su hogar. De inmediato, las alarmas llegaron a la sede del Cuerpo de Bomberos de San Antonio del Táchira y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de la jurisdicción, arribando al lugar para hacer las inspecciones.
Los funcionarios bomberiles verificaron el estado del caballero y esperaron a que
llegara el Cicpc para el levantamiento del cuerpo. Las investigaciones preliminares arrojaron que un infarto acabó con su vida.
Aunque los allegados avisaron a sus familiares, no se sabe si lleguen a tiempo. «Si no va a tocar recoger entre nosotros para hacer el sepelio», dijo otro vecino consultado por diario La Nación.
Su cuerpo, algo enjuto, pareciera haber presentado síntomas de desnutrición. Sin embargo, esta versión no ha sido confirmada por las autoridades competentes.
La comunidad lamenta la partida física de ‘sancocho de pato’, como le decían por cariño los residentes.