Un funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana falleció, por traumatismos generalizados, tras haber volcado y colisionado contra un árbol el vehículo Chevrolet Corsa en el que se movilizaba, en el kilómetro 90 de la vía a Orope, en el municipio García de Hevia.
El lamentable hecho tuvo lugar a avanzadas horas de la noche del lunes, cuando, por razones que funcionarios del Servicio de Tránsito Terrestre de la PNB investigan, la víctima perdió el control del automóvil, se salió de la vía y colisionó contra un árbol, tras el volcamiento.
De acuerdo con una fuente militar, durante esta última acción, mientras el carro daba vuelas, la víctima se salió por una ventanilla, lo que provocó que el vehículo le cayera encima, en la cabeza, concretamente, causándole la muerte en el acto.
La muerte del sargento primero Edison Vladimir Hernández Molina, de 29 años, afectó a sus compañeros de la GNB pertenecientes al Comando de Zona 21, pero sobre todo a los de la Segunda Compañía del Destacamento 213, con sede en Boca de Grita, a la cual estaba adscrito desde febrero del año pasado.
Consideraban a este tachirense como un efectivo de tropa profesional, honesto, trabajador y responsable. Había egresado como guardia nacional en la promoción número 96 “Comandante Supremo”.
Se dijo que, al momento de fatal accidente, Hernández Molina se dirigía a Boca de Grita a buscar a un familiar.
Por ahora, los expertos de Tránsito Terrestre de la PNB analizan la situación para conocer si la causa del accidente fue originada por una falla mecánica o humana, o si otro vehículo lo sacó de la vía.
Su cadáver fue ingresado a la morgue del Hospital Central de San Cristóbal, a primera hora de la mañana del martes, por parte de una comisión de la PNB perteneciente a La Fría.
Miriam Bustos