Hasta este martes se recuperaban satisfactoriamente, en el Hospital Central de San Cristóbal, la madre e hija que fueron abaleadas por un exfuncionario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), esposo y padre respectivamente de ellas, durante una violenta situación familiar que, el sábado en la noche, terminó en tragedia, en el sector El Corozo, municipio Torbes.
Como ya se informó oportunamente, las dos mujeres fueron objeto de la ira del exmilitar, en medio de una gran discusión que inició poco antes de las 11 de la noche, y que abrumado y angustiado porque ellas lo amenazaban con denunciarlo por abuso sexual continuado e incesto, decidió dispararles y luego quitarse la vida.
Fanny Cecilia Patiño Contreras, de 29 años de edad, hija del victimario, fue abaleada en tres oportunidades; su madre, Fanny Cecilia Contreras Urbina, de 47 años de edad, fue tiroteada en una oportunidad, en la región torácica.
Las investigaciones preliminares sobre el lamentable suceso, dan cuenta que el exfuncionario Luis Omar Patiño, de 55 años, presuntamente abusó sexualmente de su hija, Fanny Patiño Contreras, desde que esta tenía 14 años.
Y que más recientemente, Fanny Cecilia, la madre, tuvo conocimiento de esa situación, además de que su nieta, de 3 años de vida, había sido procreada con Luis Omar.
Se desconoce por cuánto tiempo esta terrible realidad se mantuvo en silencio, ese terrible secreto, quizá ante el resto de la familia y terceros, por cuanto se conoció, de manera extraoficial, que Luis Omar ya no estaba durmiendo en la habitación matrimonial, sino en la sala.
El hecho es que el sábado en la noche la situación pareció haber sido inaguantable, detonando en máxima violencia, luego de que las dos mujeres amenazaron a Luis Omar, con denunciarlo ante las autoridades, por lo que había hecho.
Este habría tomado un arma de fuego que accionó contra ambas. Minutos después, las dos fueron auxiliadas y trasladadas al Hospital Central de San Cristóbal.
Mientras, comisiones de la GNB, PNB y hasta del Cicpc, se aglomeraron a las afueras de la casa en la que ocurrió el hecho, en la vereda 2 del barrio Santa Lucía, con el propósito de aprehender a Luis Omar, de 54 años, quien se negaba a entregar el arma.
Incluso, los funcionarios trataron de disuadirlo de quitarse la vida, informándole que sus esposa e hija continuaban vivas; sin embargo, a las 11:40 minutos de la noche del mismo sábado, una detonación que se dejó escuchar en el interior de la vivienda, les hizo ver que el exmilitar había decidido quitarse la vida.
Al entrar al inmueble, efectivamente, lo hallaron muerto. Sentado en un mueble de la sala, Patiño se disparó en el temporal derecho, muriendo al instante.
Este lunes fue sepultado en el cementerio de Santa Ana del Táchira. (Miriam Bustos)