Ana Luisa Rojas, profesora jubilada y habitante del barrio Curazao, en San Antonio del Táchira, manifestó este jueves su preocupación por la dilación que se ha registrado en torno a la aplicación de la tercera dosis para los adultos mayores que recibieron la Sputnik V.

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Jonathan Maldonado
“Hemos ido en varias oportunidades al Centro de Diagnóstico Integral (CDI) del barrio Lagunitas, pero no ha habido respuesta oportuna”, precisó quien ya se le cumplió la fecha para aplicarse el refuerzo. “El mismo escenario lo tiene mi esposo”, dijo.
Estas inquietudes, que también han llegado de otros ciudadanos de la tercera edad, llevaron al equipo reporteril de La Nación a apersonarse al CDI de San Antonio, donde actualmente se aplica la dosis de refuerzo para quienes recibieron la Sinopharm o Verocell.
La fuente consultada indicó que para el próximo martes, 8 de marzo, se estaría comenzando con la aplicación de la tercera dosis para las personas que fueron atendidas con la Sputnik V.
“Ya las Sputnik Light se encuentran en San Cristóbal”, prosiguió mientras dejaba claro que el traslado de estas vacunas requiere de un trato especial, debido a la refrigeración que ameritan tener durante el viaje.
“Lo más seguro es que arranquemos el martes”, reiteró el galeno consultado, mientras recalcaba que en el CDI se siguen aplicando las dosis de Sinopham para quienes la necesiten.
La profesora destacó que, junto a su pareja, estaba averiguando en Colombia para ver qué vacuna podían aplicarse, en vista de la demora que hay en Venezuela para la tercera dosis del amplio grupo que obtuvo la Sputnik V.
“El llamado a las autoridades es a que se preocupen por el refuerzo de nosotros, pues es muy importante. En otras partes del mundo el refuerzo ya fue aplicado a todos los grupos etarios y se está evaluando la eliminación del tapabocas en espacios abiertos”, explicó la dama.
Rojas espera que Venezuela también logre este objetivo y, en algún momento, la ciudadanía deje de usar el tapabocas en los lugares abiertos.