Regional
Escepticismo: En un mes el salario o la pensión no alcanzarán para nada
19 de marzo de 2022
Ni el salario, ni la pensión. Sí, es un poco más de dinero, pero igualito, no alcanza para nada ahora, y menos será dentro de unos quince días o un mes, cuando ya todo esté más caro.
Tal es el sentir de los asalariados, al opinar sobre el impacto en su vida económica del nuevo ingreso mínimo y de la pensión, que entró en vigencia el 15 de marzo.
Ese ánimo se veía reflejado en el trajinar de este viernes en la mañana, en el área comercial de Palo Gordo, llamada La Toica, normalmente de mucho movimiento, pero esta mañana casi sin actividad, en el municipio Cárdenas.
Por la zona, consultamos sobre ese incremento salarial, tema que, aparentemente, por la reacción de algunas personas con quienes hablamos, no despierta emociones, a pesar de que representa casi 20 veces más el monto que se percibía actualmente, o sea 1.757 % de aumento.
Por ejemplo, Moisés Zambrano, un joven comerciante en La Toica, y aparte, estudiante de Gastronomía, no cree que ese nuevo aumento anunciado, a 175 bolívares –incluyendo el bono alimentario o cesta-tique, va a ayudar la economía. No, no. Para nada, dice. Los venezolanos ya tenemos la experiencia de que han aumentado el sueldo seis, ocho veces, y no hay resultados.
—Todo sube, agrega. Incluso, ahora ya los precios están subiendo, sin haber cobrado la primera quincena.
— ¿Qué ha subido?
— Más que todo, responde, las proteínas: la carne, los lácteos, pollo, huevos, o sea los alimentos más básicos, que es lo que siempre sube. Y seguirá subiendo. Pues, la cantidad de dinero no es lo que está mal -responde a la pregunta de si es suficiente para algo ese aumento-. Lo que está mal, es hacerlo de la manera como lo hacen, porque ya nosotros, los venezolanos, sabemos que no va a funcionar para nada. Seguro dentro de quince días, un mes, veremos que no rinde.
Entonces, continúa Zambrano, lo que hacemos todos es estirar y estirar el sueldo, procurando que alcance un poco más. O sea, tratar de sobrevivir. Y bueno, uno nunca se queda parado, por decirlo así, pero igualmente no va a alcanzar. Eso se sabe.
— ¿Cómo hace para estirar el sueldo, como usted lo expresa?
— Y para poder estirarlo, hay que rebuscarse siempre, que es lo que hacemos la mayoría. Todos sabemos que la economía aquí, en Venezuela, es muy inestable. Porque no hay producción. Y no hay, no se ve de verdad, la preocupación, que uno vea a la gente del gobierno “como que sí, queremos ayudar”. O sea, uno sabe que eso es puras falsedades, para mantenerlo a uno engañado, y ya. Aunque, concluye, estamos los que no nos dejamos engañar.
Igual con la pensión
José Rosales, un adulto mayor a quien le preguntamos, nos dice de entrada: ¿La pensión? Eso no alcanza para nada. Porque ¿qué hace uno con eso? Y en efectivo, pues, ¿qué le van a dar a uno? Solo con la tarjeta.
–— ¿Usted tiene ingresos como trabajador?
— No. Yo solo con la pensión, pero eso no alcanza para nada – respondió Rosales, quien ignoraba lo del aumento de salario y pensión. Lo demostró cuando le preguntamos
— ¿Ya cobró la pensión de ahora?
—No. No he ido al banco, respondió.
— ¿Usted sabe cuánto le van a pagar?
— No. –respondió en seco y le informamos que van a depositar 130 bolívares, le dijimos, pero en estos días, con el retroactivo, le depositan cerca de 200 bolívares.
— ¿Lo subieron? -, preguntó sorprendido.
— ¡Ah, bueno! Ya con eso se compra alguito más.
No llega el CLAP
— ¿El salario nuevo? Bueno, para mí está bien. Pero, por otro lado, está mal, porque no llega la caja CLAP, que es con lo que uno se arregla. Y encima, nos tienen siempre alcanzados por la luz. No hay luz. Estos apagones duran siempre tres, cinco horas.
Así responde Luis Barragán Mora, quien agrega: El aumento de salario está bien, sí, pero no alcanza para nada. Le digo, uno se ayuda con la caja CLAP, pero esta no llega de forma regular. Solo de vez en cuando, y siempre viene sin aceite, sin azúcar, sin leche. No, eso no está bien.
Barragán asegura que tiene 64 años de edad, 36 trabajando en la Guardia Nacional, dice. Soy trabajador de la Guardia, reitera.
Y aprovechó para exponer un poco sus preocupaciones, activadas, por cuanto al momento de hablar con él, la zona de Palo Gordo ya tenía dos horas y media sin luz, como ocurre todos los días, según aseguran los vecinos.
— Yo le digo, señor Maduro, háganos el favor a todos los viejitos, a todos los obreros…. Ahora, yo quiero saber, señor Maduro, ¿qué pasa con la luz? ¿Qué pasa con la comida para nosotros (la bolsa CLAP), para los obreros? Ahora también el gas, que dura hasta veinte días que no llega, cuando se pide. Aquí en Palo Gordo no hay junta comunal, y lo que hay no sirve para nada.
Barragán agregó: Y esto va también con el señor Freddy, el gobernador: Las carreteras aquí, en Palo Gordo, no sirven para nada. Mande siquiera un bacheo para esta zona, gobernador. Y disculpe, señor presidente, que le estoy hablando así.
Y nos reitera: la pensión no sirve para nada. Ahora con esos 130 bolívares., igual no alcanzan para nada. Que nos haga el favor y nos de otro poquito más para todos los obreros.
Humberto Contreras