Medellín, Bogotá, Bucaramanga, Neiva, Cali y Boyacá dijeron presente en el evento

Jonathan Maldonado

La ciudad de Cúcuta, en Norte de Santander, fue la sede para el Segundo Congreso Internacional de Plazas de Mercado, que apuntó a un intercambio comercial binacional seguro.

Los avances de reapertura de frontera, que se han venido dando desde el pasado 26 de septiembre y que tuvo gran realce con la habilitación del paso de vehículos particulares hace ocho días, aumentaron las expectativas de los empresarios y productores del vecino país.

Al congreso, celebrado en el Hotel Casino Internacional, ubicado en el casco central de la ciudad, asistieron cerca de 79 empresarios, todos con los ojos puestos en Venezuela como un potencial cliente para exportar sus productos.

Durante las conversaciones con los panelistas, manifestaron la necesidad de que haya más flexibilización y voluntad al momento de crearse alianzas binacionales, que no se registren trabas, sino al contrario, que los permisos y demás trámites sean expeditos.

Víctor Bautista, secretario de frontera de la Gobernación de Norte de Santander, precisó que la reapertura progresiva va más allá de un acto simbólico que se afianza con los más de 43 millones de dólares de intercambio entre los dos países.

Bautista es consciente que hace falta mucho por mejorar y está convencido que los panoramas tendrán un mejor rostro con el transcurrir de los meses y cuando la confianza se instale por completo.

Más de 600 personas, según Ricardo Pascuas, organizador, asistieron al congreso que sumó dos días de exhibición de lo que Colombia produce. “Hubo 34 stands con gran variedad de productos y emprendimiento”, acotó.

Pascuas recalcó que en la actividad participaron seis delegaciones provenientes de Medellín, Bogotá, Bucaramanga, Cali, Neiva y Boyacá. “También se involucraron panelistas de Perú, Argentina y Venezuela”, señaló.

Representantes de la Alcaldía de Cúcuta y de Rubio también arribaron a los salones donde se desarrolló el congreso con carácter de integración y de oportunidades entre las dos naciones.

Arturo Infante, agricultor y exportador, es fiel creyente que el panorama económico puede ser mucho mejor con la integración de Venezuela como cliente principal para futuras exportaciones.

Recordó que el mercado colombiano se ha ido diversificando y son varias las opciones que permiten a los demás países a desviar la mirada hacia lo que se hace en Colombia.