La presidenta de la Comisión de Asuntos Laborales de Conindustria, Maryolga Girán, ha señalado que el gobierno venezolano no puede permitirse aumentar los salarios debido al riesgo de inmanejables pasivos, pero ha propuesto que los bonos podrían ser una alternativa temporal para mejorar los ingresos de los trabajadores.

Según Girán, los bonos podrían ser una solución viable durante un período de dos años, mientras la economía se recupera y el diálogo social avanza. Sin embargo, ha aclarado que estos bonos no serían calculables para la antigüedad ni para las prestaciones sociales en forma retroactiva.

Girán ha destacado la necesidad de establecer un monto que sea pagable y suficiente para los trabajadores, sin distorsionar la economía, y ha sugerido analizar los parámetros de los sectores para saber cuánto podría ser un eventual aumento, en concordancia con el precio de la canasta alimentaria. La abogada ha enfatizado que establecer un monto depende de la caja de las empresas, de la producción del país y otros temas que se deben ampliar en un diálogo inclusivo.

Según Girán, la Ley del Trabajo actual está desfasada en el tiempo y es necesario abrirse a los cambios mundiales representados en el teletrabajo, la inteligencia artificial y los nuevos retos de los mercados globales. Por tanto, ha enfatizado la importancia del diálogo social y ha señalado que por primera vez se espera que haya un aumento en los salarios, resultado del diálogo, aunque al final la decisión la tomará el Ejecutivo.

En este contexto, los miembros de los sindicatos han pedido mejores salarios durante la marcha del Día del Trabajo en Caracas, Venezuela, el 1 de mayo de 2022. La propuesta de Girán sobre los bonos podría ser una solución a corto plazo, pero el aumento de los salarios sigue siendo una demanda importante de los trabajadores en Venezuela.

Redacción web