Con la misma seriedad que imparte sus clases, el destacado locutor llega a muchos escenarios venezolanos, para entretener al público con chistes que mayormente van inspirados en el entorno social de los últimos años
José Rafael Briceño Pulido es un profesor universitario venezolano, que decidió salir del aula de clases, para incursionar también en el mundo del entretenimiento a través de la comedia, pero no solo esto, muchos identifican a Briceño como el profesor de las misses, por su paso por la “Quinta Rosada” para enseñar oratoria a bellas mujeres venezolanas que triunfaron a nivel internacional y que lo dio a conocer mucho más en el mundo artístico.
Pero más allá de ser profesor y comediante, el hombre de 52 años, también es locutor, posee una inigualable voz que lo caracteriza y lo hace destacar en el mundo radiofónico.
El “Profesor Briceño”, así se da a conocer este profesional venezolano que, por ser hijo de la fallecida Mercedes Pulido de Briceño, destacada en el ámbito político venezolano, permitió a este comediante quizás estar un poco cerca de este tema, al que además ha hecho referencia en algunos de sus shows de comedias, donde a través del sarcasmo o chiste, menciona situaciones un poco ligadas a la política venezolana.
Con varias de sus giras como comediante, el profesor Briceño ha visitado al Táchira y el próximo 7 de mayo llega de nuevo con “Descosido”, su más reciente show. Por ello el equipo reporteril de La Nación lo abordó para conocer un poco más de este destacado personaje y teniendo en cuenta que es de los pocos artistas que aún permanecen en Venezuela y recorre el país no en campaña política sino para hacer reír a los venezolanos, quisimos tocar con él un poco el tema político, para saber su perspectiva del contexto actual en la sociedad venezolana.
–¿Cómo se relaciona o separa su carrera de educador con la de comediante?
– Es muy sencillo: Mi función cuando soy comediante es netamente entretener, como decía Aquiles Nazoa: “Si usted aprende algo, usted lo aprende sin que se dé cuenta”; pero la verdad, lo que uno está haciendo o diciendo, no lo está haciendo para educar sobre algo, sino para entretener.
Mientras que, en mi rol de educador, mi objetivo es muy sencillo, que usted salga con un aprendizaje, con una lección, con algo que vaya a utilizar. Sin embargo, a veces cuando uno es educador utiliza el chiste para explicar una idea. Y a veces cuando se está haciendo un chiste para algún show se utiliza la capacidad que tienes de explicar algo como un recurso para prepararlo, pero el chiste como tal tiene una función netamente de entretenimiento.
–¿No extraña ser el profesor de Oratoria del Miss Venezuela?
–No extraño el Miss Venezuela, porque yo creo que cumplí mi rol a cabalidad allí, es decir, mientras yo estaba llegamos a tener tres Miss Universo, una Miss Mundo, varias Miss Intercontinental y pues llegó un momento en el que dije ¡Ya yo he cumplido aquí y no quiero dedicarle mi vida solo a esto!
Porque el Miss Venezuela es una marca que se queda muy pegada, pasan los años y uno ha hecho 90 shows, programas de televisión o de radio y la gente te va a recordar es por el Miss Venezuela y todavía eso es una consecuencia de haber trabajado allí, aunque le agradezco el enorme aprendizaje que significó para mí esa experiencia.
–¿Qué opina del actual escenario político en Venezuela?
–Haber sido hijo de Mercedes Pulido, me permitió percibir dos cosas: en primer lugar, ver la política de cerca, la cantidad de necedades y mezquindades que entran en juego cuando el poder está de por medio; pero, en segundo lugar, también pude observar que desde la política se podía mejorar la vida de la gente.
Cuando las personas renuncian a la política como un mecanismo de organizar las necesidades y los recursos que tiene una sociedad, agarrando como quien dice el control de la situación, pues lo va a utilizar más a su favor.
Entonces, en este momento veo una situación grave, porque hay una total desconexión de todos los ámbitos políticos con la realidad de la gente y más grave aún, pero quién sabe si es hasta positivo en cuanto a lo que pueda plantear el futuro, veo a la gente finalmente está dejando de esperar algo de la política y decididos a arreglarse su vida solos.
Claro, siempre llega ese momento en el que te topas con el Estado o te topas con las decisiones políticas que afectan la vida, pero cuando tú has decidido rehacer tu vida, montar un emprendimiento, olvidarte de que te vayan a regalar y a trabajar para sacar lo tuyo, así sea afuera podemos avanzar. Los venezolanos estamos unidos, pero estamos viviendo en un país que no se parece al que creíamos que íbamos a vivir, sin embargo dejamos de esperar que desde afuera vinieran soluciones y estamos resolviendo nuestra vida.
Venezuela no se arregló, sino que los venezolanos están arreglándose aquí y afuera. Cuando llegue ese momento más adelante, que de nuevo choquen los intereses de lo que las personas quieren con lo que le ofrece la política, ya será un escenario distinto, porque cuando lo que la gente quiere deriva desde lo que ha venido realizando por su cuenta y no desde lo que le debe a un Estado o le debe a un político, eso va a plantear quizás un cambio en la forma que se está relacionando todo el mundo.
–Usted como comediante, ¿qué opina sobre la candidatura de un conocido artista venezolano (El Conde) a las elecciones presidenciales?
–Opino lo mismo que otras candidaturas: Quien quiera que se esté planteando ser el Presidente de Venezuela, quien quiera que sea precisamente por esa separación que hay entre lo que es el ejercicio político y lo que la gente espera de los políticos, debería estar ya casa por casa, debería estar en un proceso de escucha, de verdaderamente evaluar y analizar dónde está la gente, pero yo no veo ningún candidato verdaderamente en ese proceso.
–¿Le gustaría incursionar en el ámbito político?
–No lo haría, porque sería muy malo, yo creo que para eso hay que formarse, hay que haber tenido una experiencia de vida en la cual uno supiera negociar, formar equipos, liderar, y eso no necesariamente es lo que uno desarrolla en el ámbito de la comunicación aunque puede ser, pero en el ámbito de la comunicación uno está lidiando con lo que creemos, frente a lo que todos los demás creen, mientras que en el ámbito de la política está allí presente el estar consciente de lo que realmente se puede hacer y los comediantes somos a veces demasiado inconformistas como para tener que meternos en el cajón de lo que exige la realidad política.
–¿Qué es Descosido?
–Es el show en el que termina de concretarse “Briceño de Visita”, porque el material es muy similar, pero era un momento en que estaba procesando todo, “Descosido” es como quedo yo, es precisamente echar una mirada tanto a uno a través de la pandemia, a través de las redes sociales, a uno a través de la relación entre hombres y mujeres que es tan compleja en este momento, porque hay quienes nos quieren decir que todo lo que es masculino es producto de la cultura y no es producto de ser hombre, pero los que somos papás sabemos que muchos de los que tienen una niña o niño no le diste el género en el entorno sino que eso ya viene en el disco duro.
“Descosido” es esa oportunidad de reírnos de todo lo que hemos aprendido, de todas las torpezas que hemos cometido, pero también de levantarnos y darnos cuenta de los pedazos en que estamos separados y hacer un intento de armarlos a través del humor.
–Usted ha tenido varias presentaciones en el Táchira ¿Qué lo motiva a visitar este estado y cómo ha sido la receptividad del tachirense?
–A mí me encanta presentarme en San Cristóbal, mi papá vivió ahí muchos años de su juventud, la familia de mi esposa también es sancristobalense.
El gocho para mí tiene un carácter increíble, porque ellos van a disfrutar a un show, el tachirense tiene la virtud de que no va a un show por cumplir con una obligación social, va porque quiere disfrutar y entiende lo que es un chiste. Además, sabe separar el chiste de la indignación social que puede producir en este momento cualquier contenido, sabe reírse de sí mismo y eso es increíblemente valioso.
Para mí el gocho es muy distinto al andino; este último es lisonjero, es cortés, pero a la vez casi que, entregado a la audiencia, mientras que el tachirense lo reta a uno.
Mientras el andino nos dice si se va a tomar un café, si se va a quedar, el gocho dice no se va a tomar un café, no se va a quedar, ese “no” allí es un reto que siempre está haciendo el gocho.
Y el reto con “Descosido”, es que quien no pudo ver “Briceño de Visita” o los que sí lo haya visto, termine de ver un show concretado, esta es la última presentación y es uno de mis shows favoritos de todos que he hecho a lo largo de esta carrera. Así que los espero el 7 de mayo en el Teatro de la UNET de San Cristóbal a las 6 pm. (Maryory Bustamante)