En la asamblea general de Profranquicias, la presidenta del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), Tiziana Polesel, destacó que la falta de experiencia y la baja sostenibilidad son los principales factores que han llevado al cierre de numerosos restaurantes en la capital venezolana.

Polesel explicó que los negocios gastronómicos requieren una especialización muy específica y una cuidadosa preparación previa, incluyendo una planificación estratégica rigurosa. Si se emprenden únicamente desde el deseo y la disponibilidad, puede faltar un elemento crucial en la ecuación, lo que aumenta significativamente las posibilidades de fracaso. La presidenta del gremio resaltó la importancia de conocer profundamente el negocio y realizar una planificación estratégica adecuada para maximizar las oportunidades de éxito.

Durante su intervención, Polesel también señaló que el sector gastronómico ha experimentado una reducción en sus bienes y servicios durante el primer cuatrimestre del año. Esto se debe, en gran medida, a la pérdida del poder adquisitivo de los venezolanos y a las constantes fallas en el servicio eléctrico que afectan especialmente al interior del país.

La falta de capacidad para adquirir plantas eléctricas es un obstáculo significativo para los establecimientos de comida en Caracas, ya que dependen en su totalidad del servicio eléctrico nacional. Esta situación genera serios problemas no solo en la operatividad diaria de los restaurantes, sino también en el deterioro de su equipamiento.

Ante esta situación, la presidenta de Consecomercio expresó su esperanza de que el consumo mejore a partir del mes de junio. Esta expectativa se basa en la fluidez económica que se espera gracias a la apertura de la frontera con Colombia y el incremento del intercambio comercial con las islas ABC, Aruba, Bonaire y Curaçao.

Redacción web