Un estimado de 700 metros de cable de electricidad fueron hurtados recientemente del campo de fútbol de Barrio Sucre, municipio San Cristóbal, a pocos metros del club deportivo del Colegio de Ingenieros.

“Es muy triste tener que informar que en el campo de fútbol nos hurtaron el cable que va desde la brekera principal, ubicada al frente del kiosko, a cada una de las torres de iluminación”, dice un mensaje que circuló en la referida comunidad y compartieron en la mensajería de Yo Reporto a La Nación.

Los afectados contaron que fue en la madrugada del pasado lunes, 29 de mayo, cuando los ladrones cometieron el hurto que dejó sin servicio al espacio deportivo. Consideran que se trata de un acto vandálico que atenta contra el deporte de Barrio Sucre y San Cristóbal en general.

Los vecinos del sector detallaron que los hampones se aprovecharon de la oscuridad de la noche y los cortes de luz para romper todas las tanquillas y llevarse un estimado de 700 metros de cable 1/0 TTU, cuyo precio promedio es 10 dólares el metro. “Es una pérdida cuantiosa y un daño grave a las instalaciones”, lamentaron los usuarios de esta instalación.

Más de 700 deportistas afectados 

Según los habitantes del sector en ese espacio destinado a la práctica del fútbol entrena unos 500 niños de diferentes escuelas y al menos 200 jugadores amateur.

Detallaron que para lograr tener en buen estado el campo deportivo se creó una junta administradora integrada por vecinos de la zona.

Los residentes sostuvieron que para lograr mantener en óptimas condiciones la cancha ha sido necesaria la autogestión, meta que han logrado alquilando a los aficionados durante la noche.

Las distintas escuelas de fútbol que entrenan a niños, niñas, adolescentes y jóvenes de otras edades, durante el día no pagan nada. Los ingresos para el mantenimiento del campo se consiguen en horas nocturnas, pero ahora sin electricidad es tarea imposible. “Restituir los cables resulta muy costoso”, indicaron con tristeza.

De acuerdo con los habitantes de la zona, la junta administradora, conformada por un grupo de vecinos, encargada del campo deportivo denunció el hecho ante el CICPC. “Los funcionarios receptores informaron que harán las investigaciones correspondientes para dar con los responsables de este delito”, acotaron.

Bleima Márquez