Regional
Fundación Arias Blanco de fútbol sigue viva en la palestra regional
13 de julio de 2023
El 5 de julio el ente deportivo conmemoró la Firma de la Independencia nacional con un intercambio deportivo en la cancha de arena de la antigua Plaza Venezuela de la Concordia
Homero Duarte Corona
Nació como Escuela Monseñor Arias Blanco, más adelante pasó a ser club, cuando creció, con un buen número de estudiantes-futbolistas, y desde el momento que se puso los “pantalones largos”, con un nombre bien ganado en el contexto estadal y nacional, su primer mentor, el profesor Jorge Antonio Olivares, la transformó en Fundación.
Más de tres décadas de largo trajinar, muchos logros, pero también decepciones. De ser un ente deportivo modelo en Venezuela, la situación país y la pandemia, prácticamente terminó con la ilusión de dirigentes, padres, representantes y sus principales protagonistas: el semillero, los futuros ases del balompié a lo largo y ancho del país.
De un universo de casi dos centenares de jugadores, desde la categoría Mundialito hasta Juvenil, con títulos municipales y estadales a granel; participaciones internacionales en varios países de América, dejando plasmado el sello de su buen fútbol, apenas quedó la historia, sobrevive a medias en la actualidad, una quimera de lo que fue.
Tomás Rincón, Jean Carlos Maldonado, Edgar Pérez Greco y otros cuantos jugadores que brillaron y aún siguen dando que hablar en el panorama nacional e internacional tocaron el primer balón en la Escuela Monseñor Arias Blanco; allí llegaron tomados de la mano de sus progenitores, para años más tarde salir formados, ir directo a clubes de mayor talante, algunos a cerrar filas en clubes profesionales.
El profesor Jorge Olivares, aferrado a su causa
Se resiste a tirar la toalla al igual que un boxeador cuando está a punto del nocaut… no llega a la decena de muchachos los que ahora hacen vida en la institución futbolera. Los motivos sobran, uno y mil problemas que no hace falta enumerarlos, el país deportivo y económico los conoce.
Un SOS, pudiese ser el grito del profesor Olivares-como todo el mundo lo conoce-, la aparición de una mano amiga, corazones nobles que se unan a su causa de rescatar la Fundación Monseñor Arias Blanco. Más de medio siglo en estos avatares del deporte, primero en el atletismo, carreras cortas y de largo alcance en el asfalto; y luego el salto al fútbol, disciplina que la convirtió en su maná, la razón de ser de su existencia.
Aún quedan mecenas en el deporte, entregar el alma si es preciso en pro de una causa, y uno de ellos, Jorge Antonio Olivares, que en el otoño de su vida, cuando seres de todo el mundo están disfrutando de sus hijos y nietos, su familia en general, él continúa empecinado en la formación del deportista, en este caso el futbolista, sin recibir nada a cambio.
Un homenaje a la patria
El pasado 5 de julio se cumplieron los 212 años de la Firma de la Independencia de Venezuela, y el profesor Olivares no quiso dejar pasar por alto esta fecha tanta importante para la nación bolivariana; en su búnker de la antigua Plaza Venezuela de la Concordia, convocó a un intercambió futbolero entre su Fundación, alumnos-atletas del colegio Monseñor Arias Blanco y la Academia Romen FC, del profesor Robinson Omen.
Desde las 9 de la mañana y hasta la una de la tarde se jugaron cuatro partidos en las categorías Mundialito, Preinfantil e Infantil C, enfrentamientos de buen fútbol, cada jugador dejando constancia de su pundonor y gran futuro en la disciplina. Tres de los cuatro encuentros concluyeron igualados que obligó al castigo de los penales para definir los ganadores.
Mucha drenalina por parte de jugadores, cuerpos técnicos, padres y representantes en las tribunas, cada quien pujando por sus equipos. Los 5tos y 6tos grados A y B del colegio Monseñor Arias Blanco fueron los grandes protagonistas, ninguno quería perder, trayendo consigo más emotividad, una fiesta deportiva sin parangón.
Como colofón en lo competitivo, los directores técnicos de los equipos invitados conformaron dos combinados entre los mejores y de allí hacer un partido que resultó un espectáculo, un encuentro sin desperdicio, digno de la retina de cualquier buen conocedor de fútbol.
En el cierre y para incentivar a los muchachos, el profesor Olivares les hizo entrega de una especie de combos, contentivos en chupetas, caramelos y galletas, que fue bien recibido por cada uno de los participantes.
No quiso pasar por alto la celebración, el profesor Olivares aprovechó la presencia de los medios de comunicación hablados y escritos para hacer un llamado a las familias de la Concordia y San Cristóbal que tengan hijos que les guste la práctica del fútbol para que se acerquen en horas de la tarde a las instalaciones de la Plaza Venezuela y los inscriban, con la seguridad que en un futuro no muy lejano pasen a ser los relevos de Tomás Rincón, Edgar Pérez Greco y Gean Carlos Maldonado entre otros, quienes se formaron en la Escuela Monseñor Arias Blanco, hoy en día Fundación.