Continúa el deslizamiento de tierra, que además de obstruir el cauce de la quebrada La Capacha, originó la pérdida de dos viviendas
Norma Pérez
Desde el 28 de julio, cuando se suscitó un deslizamiento de tierra en el sector Mata de Caña del municipio Junín, los vecinos hicieron un llamado de auxilio ante la gravedad de la situación.
El problema persiste, agravado por las lluvias, con la consecuencia que dos familias perdieron sus casas, mientras que las demás pueden correr este mismo riesgo.
Janeth Angarita Torres, residente de Mata de Caña, manifestó su inquietud, pues desde el primer deslizamiento, el cauce de la quebrada La Capacha fue tapiado casi en su totalidad, lo que genera que cuando hay aumento del caudal, el agua se desborda.
“Ya desaparecieron dos viviendas; algunos pudieron desocupar a tiempo, pero en una de las casas que se desplomó se perdieron los enseres, pues no hubo oportunidad de sacarlos”.
Indicó que todavía quedan tres casas, por su ubicación, en peligro de caer, pero la gente se mantiene allí porque no tienen a dónde ir. Desconoce el destino de quienes se quedaron sin techo.
Otro problema que deben enfrentar, es que se han caído árboles de gran tamaño, por lo que acudieron al Cuerpo de Bomberos en busca de ayuda.
“Los funcionarios del Cuerpo de Bomberos de Rubio vinieron, y mientras cortaban uno que todavía estaba en pie, el árbol se cayó con un bombero encima. Afortunadamente no salió lesionado”.
A la fecha, aun cuando han acudido a diversas instancias, no obtienen respuesta:
“En la alcaldía nos dijeron que no tienen recursos, que debemos tener paciencia. Y una máquina que supuestamente iba a comenzar a trabajar aquí esta semana, al parecer le dieron otro uso porque nunca llegó”.
Por los momentos, el temor persiste al igual que el riesgo. El llamado de los habitantes de Mata de Caña es a las autoridades, para que tomen las acciones pertinentes de manera inmediata. El peligro es inminente.