La entrega rápida de comida informal se está volviendo menos popular a medida que más personas se vuelven locas y optan por comida para llevar o en persona.

La caída en la entrega se debe en gran parte a que los consumidores están atentos a sus billeteras, dicen los analistas. Con los bloqueos pandémicos detrás de nosotros, las personas ya no pueden justificar el pago de tarifas y precios de menú inflados asociados con hacer clic en “Pedir” desde el sofá.

Y algunas cadenas informales rápidas se están volviendo nostálgicas por los días del modo duende.

-Sweetgreen ha cumplido con menos pedidos de entrega y más recogidas recientemente, y la cadena de ensaladas no alcanzó las estimaciones de ingresos generales del último trimestre.

-Las entregas para el competidor del tazón de salud Cava han disminuido de manera similar, con recolecciones en aumento. Eso contribuyó al cauteloso pronóstico de crecimiento de las ventas de la compañía para el año (pero también lo hicieron los crecientes precios de la gasolina y otras preocupaciones económicas universales).

-Los ingresos por entrega de Chipotle cayeron un 15,8 % el último trimestre en comparación con el mismo período del año pasado.

No todas las empresas que se enfocan en la entrega se han visto tan afectadas. Las ventas de entrega de Uber aumentaron un 14 % y las de DoorDash un 25 % en el último trimestre, pero la empresa matriz de Grubhub informó una disminución en los volúmenes de pedidos en América del Norte este año.

Vía Morning Brew