Frontera
¿Por qué la frontera sigue estancada económicamente a un año de la reapertura?
27 de septiembre de 2023
El analista de frontera insiste en la reactivación de los puentes las 24 horas y en una Zona Económica Especial
Jonathan Maldonado
A un año de la reapertura de la frontera entre Táchira con Norte de Santander, podemos concluir que aún faltan por retomar y recuperar varios aspectos que dinamicen el desarrollo económico y social de esta zona, en especial el eje San Antonio del Táchira – Ureña.
Así lo aseguró el analista en temas de frontera y exalcalde del municipio Bolívar, William Gómez, quien manifestó que pese a las grandes expectativas generadas a raíz del anuncio de la reactivación del intercambio comercial y del paso formal por los puentes internacionales, la realidad, hoy en día, es otra, pues el estado Táchira, con mayor énfasis en los municipios fronterizos, sigue estancado.
«En lo económico, solo basta con recorrer el centro de San Antonio del Táchira y Ureña para ratificar que más del 90% del comercio y la industria continúan paralizados, mientras que en lo social un alto porcentaje de la población ha tenido que emigrar por falta de empleos formales», detalló Gómez.
En torno al paso por los tramos binacionales, lamentó que esté limitado por 15 horas, «cuando debería estar abierto las 24 horas para incentivar la economía nocturna». Igualmente, abogó por la pronta autorización para la reactivación de las casas de cambio.
«Otro punto pendiente en frontera es el transporte binacional de pasajeros, el cual, a la fecha, no se ha restablecido en su totalidad, por falta de autorizaciones y permisos por los ministerios del Transporte, aunado a tres decretos municipales que, en vez de ayudar, entorpecen la prestación del servicio», enfatizó.
Para el analista en temas de frontera, el actual escenario económico del país, unido a la deficiencia de los servicios públicos y a la falta de productos nacionales que sean competitivos con el mercado colombiano, dejan en desventaja al productor y comerciante de la región frente a sus pares de Cúcuta en Norte de Santander, razón por la que urge decretar o promover una Zona Especial con incentivos fiscales y arancelarios como lo es una Zona Económica Especial Fronteriza o de Libre Comercio e Industria.
«Estas condiciones especiales en el territorio atraerían inversión de capital nacional y extranjero, promoviendo la generación de empleos y la elaboración de productos competitivos para el mercado nacional e internacional», acotó, al tiempo que subrayó la importancia de que el Parlamento retome la discusión de la Ley Orgánica de Fronteras y su reglamento, y la transforme en una ley de desarrollo fronterizo, así como la creación de un nuevo régimen especial para importación de mercancías menores», dijo.
A modo de colofón, recalcó que cada una de estas deudas pendientes dejan en evidencia que aún faltan aspectos por concretar para hablar de una frontera totalmente activa económicamente y dinamizada, que incluya la posibilidad de que los ciudadanos colombianos puedan transitar por todo el estado Táchira, solo con su cédula de ciudadanía, para impulsar los sectores turísticos y gastronómicos.