Reportajes y Especiales

Hurto de cables deja a tachirenses incomunicados y en penumbras

25 de febrero de 2018

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Algunas comunidades se han vuelto reincidentes en reportes; otras han hecho colectas para emprender soluciones. Madres que no pueden llamar a sus hijos en el exterior y comerciantes que no pasan tarjetas, entre las consecuencias de la fiebre del hampa hacia el cobre. Quienes son detenidos intentando sustraer este material estratégico del país, así como los que lo comercializan, son penadas con prisión de 3 a 15 años

El casco de Palmira y Patiecitos cumplieron tres semanas afectados por un hurto de cableado telefónico y eléctrico. El día del evento, la central del pueblo se hallaba en penumbras y sin vigilancia. La falta de línea y de internet ha incomunicado a cientos de usuarios y disminuido la operatividad de oficinas, banca, servicios de salud y comercio. Algunos propietarios de negocios han preferido cerrar hasta tanto no sea solventada la falla que, comentan vecinos como Xiomara Porras, resulta costosa de reponer.

No es nuevo; el hampa ya había actuado, por ejemplo, en noviembre pasado cuando hurtaron los cables de cobre que permitían el alumbrado público de la plaza Bolívar de Palmira. Tampoco es este el único radio de la afectación; desde hace 10 meses también se han visto perjudicados por la misma situación vecinos de la comunidad de El Abejal, en Guásimos. Y no ocurre únicamente en este municipio; desde hace un tiempo el hurto de cableado es noticia en el Táchira y otros estados del país.

En Palmira, municipio Guásimos, adicional al hurto de las redes de telecomunicaciones se presenta una incidencia por el hurto reiterado en la central de Cantv (en tres ocasiones han violentado las instalaciones y sustraído componentes). Actualmente se encuentran trabajando con la alcaldía y la comunidad para resguardar la sede, y a partir del lunes 26 iniciarán los trabajos para reponer progresivamente los servicios.

Desde noviembre están sin cable telefónico en el sector San José de Santa Teresa, en San Cristóbal. Como la hija de Mabel de Quintero estudia psicología a distancia, el servicio de internet le resulta fundamental. Últimamente a la joven le ha tocado “molestar” a amigas hasta la madrugada con tal de cumplir con las tareas. “Esperamos pronta solución, pero al parecer cable no hay”, ha escuchado la señora.

Se trata de la segunda vez que hurtan el cable en ese sector, recuerda Bárbara Rincón. Ella representa a los varios comerciantes afectados por la imposibilidad de utilizar el punto de venta, en tiempos en que el dinero en efectivo escasea.

Han recogido firmas y las han llevado a las instancias correspondientes, pero no ha pasado nada, lamenta la vecina Consuelo Guerrero, una adulta mayor que solía usar el teléfono.

Más arriba, en un poste de la carrera 3 de Santa Teresa, guinda al aire una evidencia del daño: un cable cortado. Por allí pasa a diario Maite Gómez, también aquejada por la falta del servicio: “Mis tres hijos están en el exterior y yo los llamaba todas las noches. Ahora nos comunicamos solo por mensajes de WhatsApp”, dice. Se impone el ahorro de datos móviles.

Acciones propias

Después de padecer el segundo hurto consecutivo del cableado aéreo, 82 vecinos de la urbanización Villa Palermo se reunieron, hicieron una “vaca” (luego tuvieron que pedir una segunda cuota, por efectos de la inflación) y contrataron ellos mismos la construcción de un ducto subterráneo a 60 centímetros de profundidad con la finalidad de empotrar el nuevo cable.

La obra está lista: desde la entrada del urbanismo hasta la calle 4 principal de Santa Teresa se observa una hilera gris de unos 400 metros de longitud a una orilla de la vía. El cable aún no ha sido instalado. Esperan con fe. Los afectados están sin teléfono y sin internet desde mayo del año pasado, recuerda el promotor de la acción vecinal Eduardo Moreno.

Los vecinos piden mayor celeridad
en la reposición de los servicios. (Foto/ Omar Hernández)

En la carrera 8 bis de La Concordia el hampa también arrancó el cableado aéreo de telefonía, a finales del año pasado. Comerciantes de la zona juntaron dinero para comprar los tubos de aluminio galvanizado que ahora revisten los cables restituidos por Cantv. “La medida ha funcionado, porque así cómo se los vuelven a robar”, observa uno de los trabajadores de la zona.

Diario La Nación consultó sobre el tema a sus seguidores en Facebook. Rosmary Gil reportó: “Desde Arjona hasta Junco Páramo la mayoría del cableado de Cantv de la vía principal y veredas… (con o sin presencia policial constante) y lo increíble es que lo han hecho de manera organizada porque habían sido noches tras noches seguidas. En trochas que van desde Junco Páramo a San Rafael han dejado cables completamente derretidos al quemarlos para extraer el cobre”.

Marlene Sanchez opinó: “En el barrio El Paraíso con prolongación a la urbanización Rómulo Gallegos, La Concordia parte baja, desde hace un año todo ese sector está sin el servicio de Cantv y desde entonces se cancela por un servicio que no funciona. Por lo menos deberían suspender el cobro hasta que se haya restablecido el servicio”.

La ciudad oscura

San Cristóbal, coinciden muchos, está en penumbras. Calles, carreras, avenidas, prolongaciones… por los cuatro costados se repiten oscuranas que, entre otros consecuencias, facilitan la acción de la inseguridad y limitan la vida social en espacios públicos.
Aproximadamente 80 % de la falta de alumbrado público en el municipio obedece al hurto de alambre de cobre, pero también de tarjetas, bombillos, lámparas y fotoceldas, amplía el director de Servicios Públicos de la alcaldía, José Simoes. El 20% restante se lo adjudica a falta de mantenimiento e interés por parte de la gestión anterior.

Para corregir este problema, desde la municipalidad hacen diagnósticos y elaboran informes con la finalidad de llevarlos a Caracas y solicitar los recursos.

Mientras el hampa sigue hurtando cables para, presuntamente, comercializar de forma clandestina sobre todo el cobre (pero también estaño, bronce y aluminio) dentro del país y en la frontera con Colombia, entre funcionarios y comunidades se mantienen posiciones cruzadas: Simoes reclama la “falta de interés” de los mismos vecinos, pero afectados como Engelbert Alviárez, en Palmira, comentan por Twitter que “no hay respuestas” por parte de los encargados de los servicios.

En sus redes sociales, Cantv hace llamados a la comunidad a cuidar las infraestructuras de comunicación y denunciar el hurto y vandalismo contra estas a través del 0800-ANTENAS (0800-2683627), 187 desde un teléfono fijo y *187 desde Movilnet.

4,394 kilogramos de cobre han incautado las autoridades en lo que va de año, hasta el 20 de febrero; tienen de preferencia la salida por La Fría, Orope y Boca de Grita.

5 kilómetros de canalizaciones han sido construidas en el Táchira para el resguardo de 19 kilómetros de redes, que se encontraban aéreas.

2751 incidencias por hurto han sido solventadas en el Táchira mediante el Plan de Resolución Integral de Averías de Cantv entre enero y el 21 de febrero.

45 personas han sido detenidas por sustracción de material estratégico; entre ellos, 35 por el rubro de cobre, cuya obtención no se limita solo a los cables de fibra óptica.

Solventadas 20.699 averías durante el 2017

Durante el 2017 fueron solventadas en el Táchira 20.699 averías ocasionadas por hurto de redes. Cantv impulsa el Plan de Resolución Integral de Averías, que ha permitido en lo que va del año 2018 -de enero al 21 de febrero- solventar 2.751 incidencias por hurto solo en la entidad.

En el Táchira se han construido más de 5 kilómetros de canalizaciones para el resguardo de 19 kilómetros de redes -que se encontraban aéreas-, trabajos desarrollados por Cantv con el apoyo de las comunidades y empresarios impactados por este flagelo.

Desde enero de 2017 al 21 de febrero de 2018, gracias al trabajo conjunto entre las comunidades organizadas -que construyeron las canalizaciones- y Cantv que repuso las redes, se ha logrado la restitución de los servicios en las siguientes localidades: Junco, Palo Gordo, Barrancas II, Tucapé, Bella Vista, Capachito I y II, en el municipio Cárdenas; avenida Intercomunal de Capacho, municipio Independencia; Toiquito, municipio Guásimos; La Grita, municipio Jáuregui; La Quiracha, municipio Junín; Caliche, municipio Ayacucho; Pirineos y Zorca Providencia, en el municipio San Cristóbal, beneficiando a 4.756 suscriptores.

Cantv y Movilnet, empresas de telecomunicaciones del Estado y entes adscritos al Ministerio para Educación Universitaria, Ciencia y Tecnología, han venido realizando múltiples acciones de seguridad preventiva para el resguardo de sus equipos, redes e instalaciones.

Entre las medidas que se han tomado para mitigar el hurto de redes está la articulación con los cuerpos de seguridad del Estado, así como el trabajo conjunto con las comunidades donde se presentan reincidencias. En algunos casos los usuarios asumen a través de la organización comunitaria el cuidado y resguardo de las redes de telecomunicaciones de su sector.

Actualmente la empresa lleva a cabo mesas de trabajo, impulsando la organización de las comunidades para elaborar proyectos que permitan resguardar las redes de telecomunicaciones para reponer servicios, especialmente en los sectores donde los hurtos son reiterados.

GNB trabaja para detectar la salida de cobre del país

Los organismos de seguridad han emprendido una lucha para detectar la salida de material estratégico en la modalidad del cobre, el cual se obtiene, en este caso, de su extracción del interior del cable, que está cubierto por material plástico. Equipos de inteligencia de la Guardia Nacional Bolivariana realizan de manera encubierta labores para detectar a los infractores.

El G/B Alfredo González Viña, comandante del Comando de Zona 21 Táchira de la GNB, declaró que la extracción de cobre es el primero de lo que se ha tipificado como material estratégico, por ser mejor pagado en el vecino país. Los otros rubros son bronce, aluminio, acero, níquel y plata, pero no tienen la misma demanda que el cobre.

Las personas que son detenidas intentando sustraer este material del país, así como quienes lo comercializan, son penadas por la Ley Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, en la que se establece prisión de entre 3 a 15 años, según sea el caso de la causa.

Indicó el titular castrense que en lo que va de año, hasta el 20 de febrero, se han incautado 4.394,095 kilogramos de cobre, los cuales tienen de preferencia, salida por La Fría – Orope – Boca de Grita con entrada a Puerto Santander – Agua Blanca y Cúcuta, en Colombia.

Además se han detenido 45 personas por sustracción de material estratégico, entre ellos 35 por el rubro de cobre, cuya obtención no se limita solo a los cables de fibra óptica, pues también se puede obtener de tuberías de gas, ciertas esculturas, entre otros.

Finalmente, mediante boletín de prensa el General de Brigada indicó que la Guardia Nacional Bolivariana sigue de frente en la lucha contra este flagelo, que no solo afecta la economía del país por la modalidad como sale del mismo, sino que a su vez afecta el normal desenvolvimiento de las comunicaciones y el fluido eléctrico que se han visto en reiteradas oportunidades alterados por quienes se dedican a cometer este delito.

Daniel Pabón