“YO NO OLVIDO el año viejo porque me dejó cosas muy buenas”, y este año que se va, sobre todo la gratitud, afinidad y amistad de numerosas personas amigas y lectores consecuentes de esta columna que el próximo mes de enero cumple 40 años de entablar ese diálogo que nos permite este gran Diario La Nación….ENTRE LOS SALUDOS por la Navidad, se encuentran nuestros buenos amigos Luis Flórez, José Silva, director de la orquesta La Tremenda; Carmen Gamboa del Comité Regional de la Belleza; el político Orlando Molina; el cantante Alexander, el propietario de La Gran Banda de Venezuela Atilio González….IGUALMENTE, la familia de Adonai y Nelly Osorio, de su hija Pilar y su nieta María José; mis ahijados Joana y Joan Manuel Vizo Duque; mis entrañables amigas Yolanda Cardona, residente en España, Beatriz Roso Porras, Marisela González, y muchas otras personas más que expresaron sus parabienes por la noche pascual y por el futuro año que se nos viene ya….NO CABE DUDA que somos optimistas por antonomasia, por lo que a pesar de las vicisitudes que hemos pasado, nos preparamos para decir a voz en cuello o a tambor batiente que deseamos no solo la dicha navideña sino el ¡Feliz Año Nuevo! con la esperanza y la fe que estos deseos se cumplan y que logremos conquistar los planes y proyectos programados para el cercano porvenir…..VENEZUELA, el continente y el mundo tendrán un venidero 2024 muy convulso, no solo por el enfrentamiento bélico que ha encendido la llama guerrera tanto entre Ucrania y Rusia sino también en el medio Oriente entre Israel y la faja de Gaza en Palestina, sino igualmente porque se procederá a la consulta del pueblo a través de una serie de elecciones…..EN EL PAÍS, por las presidenciales, igual que en los Estados Unidos y en Guatemala bajo ese vaivén ideológico de izquierdas y derechas que para ser sinceros y a lo largo de lo que va del presente siglo, no han atinado con el camino que debería conducir a una felicidad pública…..DE TODAS formas, miramos con buenos ojos que el mundo se conserve en la lucha permanente por una mejor felicidad colectiva, en donde la justicia, la paz y el bienestar sea el denominador común en este planeta que se ve entusiasmado con los avances de la ciencia, pero a la vez preocupado por la llamada Inteligencia Artificial que dejaría a un lado  el sentido del libre albedrío del hombre de hoy que bien pudiera caer en las garras de sus propios inventos.

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Y ESTO, es todo por hoy.

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MENTIRAS universales:
“Cada día será un día mejor”.

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DIOS los bendiga, ¿Saben?

VICTOR MATOS