Freddy Omar Durán

Para impartir talleres sobre la Terapia de los Hologramas, de la cual se le considera autoridad mundial, esta semana San Cristóbal contó con la presencia del doctor Rafael García Chacón, con el propósito de formar terapeutas en esta técnica así como en la de masaje reestructurativo.

Esta milenaria técnica oriental permite mediante la presión con una “varilla de holograma” aplicada a  puntos claves de las manos y los pies, manejar el dolor y superar en forma inmediata un sinnúmero de situaciones clínicas desde una migraña, un cólico renal, una bursitis, un ACV o un infarto en curso, hasta una hemorragia o una diarrea.

“Nace de técnicas terapéuticas de una concepción nueva y más profunda de cómo funciona el sistema nervioso humano, y nos damos que además de la clásica comunicación binaria del mismo, también la hay en forma de imágenes tridimensionales, los hologramas. Cada célula del cuerpo contiene la totalidad de información del  organismo, y así cada segmento pero en forma holográfica, eso quiere decir que uno tiene que buscar la imagen holográfica que representa el organismo”

La actividad fue organizada en la capital tachirense por Belkis Urbina y Lilia Flores, que aunque como muchos ya habían establecido la formación on line en el área, consideraron necesaria que de manera presencial el  fundador y presidente de la asociación Internacional de Medicina Holo-Integrativa (AMHI-Internacional), ahondara en la correcta aplicación de la terapia.

“Aunque la Terapia de los Hologramas tiene una cantidad de usos muy amplios el uso más frecuentes es en problemas relacionados con el dolor causado por lesiones, garantizándose a través de las mismas el mejoramiento de los síntomas iniciales y la recuperación de los tejidos comprometidos, que se acortan a la mitad del tiempo”

Advirtió que la terapia no tiene muchas contraindicaciones, no obstante no la recomienda en órganos trasplantados, porque a la activación del sistema inmunitario, que conlleva la Terapia de Hologramas, positiva en muchos casos, aquí no puede favorecer.

“Nos llegan casos de personas que llevan años lidiando con un dolor y lo tratan con medicamentos y cuando le hacemos la terapia, desde la primera sesión ven cambios dramáticos, y en unas cuantas más ya pueden volver a su vida normal”.

Esta terapia cobró auge desde finales del siglo pasado y ha sido impartida en varios países del mundo, y en Cuba especialmente ha sido objeto de profunda investigación.

“En la terapia de los hologramas uno revisa un órganos que se sospecha a través de síntomas que está enfermo. Por ejemplo una persona tiene síntomas de gastritis, entonces uno explora en la zona del holograma y uno va a encontrar una sensibilidad a la presión: esto indica que el órgano está afectado y también se le puede estimular para crear regulaciones del sistema nervioso sobre el estómago”