En La Parada pocos ciudadanos usaban el cubreboca
Jonathan Maldonado
Los vendedores de tapabocas retornaron a partir de este martes 19 de marzo a la frontera. Algunos se ubican en el puente internacional Simón Bolívar, lado colombiano, otros en La Parada.
Orlando Suárez, venezolano natural de Valencia y con seis años en la zona, estaba vendiendo tapabocas en la entrada al tramo binacional. «Recuerden que es obligatorio», manifestaba a los transeúntes que ingresaban al país vecino.
«Tomé la iniciativa de venderlos porque la situación está muy brava. Hay que aprovechar la medida», destacó mientras dejaba por sentado que ha vendido una buena cantidad de tapabocas.
El sol abrasador no ha hecho mella en el ímpetu de Suárez. «Hay que cumplir con la norma», expresó una ciudadana al detener el paso para comprarle el cubreboca. «Por mucho tiempo lo usamos, pero ya me había desacostumbrado», resaltó.
Más adelante, a la altura de Migración Colombia, se hallaba Norber Pinto, joven venezolano que también tomó la iniciativa de ofrecer el tapabocas. «Son varios los que empezamos hoy», subrayó con la fe puesta en que los iba a vender todos.
«Ojo, no olvide ponerse el tapabocas». Fue la frase que usó Pinto para recordarle a un ciudadano que la norma es obligatoria. El abordaje hizo que el hombre lo sacara de su bolsillo y dispusiera a usarlo.
En un recorrido que hizo el periodista de La Nación por La Parada, evidenció que muy pocos estaban usando el tapabocas, pese a que la medida se implementó, de forma obligatoria, desde este martes en el municipio Villa del Rosario, en Cúcuta y en Los Patios por la grave situación del aire.