Jonathan Maldonado
Bajo el amparo del Santísimo, decenas de feligreses acudieron este Jueves Santo a los templos de la frontera a elevar sus plegarias.
En la Basílica Menor San Antonio de Padua, los devotos se maravillaron con la decoración que rodeaba al Santísimo. Muchos aprovechaban a sacar sus fotos mientras manifestaban su fe ante Dios.
Hoy también es un día donde la gente suele visitar los siete templos, tradición que ha mermado en los últimos años por temas como la escasez de combustible.
Están quienes hacen el recorrido a pie. Sin embargo, la tarea es titánica y agotadora por la distancia que hay entre las iglesias.
«Lo importante es asistir a la casa de Dios. Hay cosas que cambian por la situación país. Yo antes hacía la visita a los templos, pero el carro no se puede sacar como antes», enfatizó Carmen Ruiz, devota.