Regional

Sobreviven colegios privados del Táchira a cuatro meses de finalizar el año escolar

15 de marzo de 2018

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“Hay muchos nubarrones, una gran angustia nacional, a nivel público y privado, el ambiente es de pesimismo, desaliento y falta de motivación. Estamos sobreviviendo para finalizar el año escolar 2017-2018”, manifestó el presidente de la Asociación Nacional de Institutos Educativos Privados (Andiep), seccional Táchira, Guerrino Guariento.

Y es que el panorama para la educación privada en todo el país es de oscurantismo, a principios de año cesaron sus actividades 13 colegios en Caracas, cinco en Maracaibo y cuatro en Puerto Ordaz. Y a escasos cuatro meses para finalizar el año escolar, muchos se enfrentan a un cierre técnico y no aseguran su operatividad para el próximo año.

—En Táchira tuvimos una reunión el pasado viernes y, aunque a ciencia cierta no sabemos qué pueda pasar a futuro, a nivel de Andiep la línea es subir los sueldos lo máximo que se pueda para asegurar la permanencia del personal, porque muchos docentes se están yendo al exterior por las facilidades que otorgan otras naciones a los profesionales venezolanos—.

Reconoció Guariento que no hay sueldo que alcance para nivelar la inflación –que a su juicio está fuera de control-, ya que según el Cendas la canasta básica está por el orden de los 35 millones de bolívares, es decir; se requiere un millón diario para volver al mismo nivel de vida que tenían los venezolanos.

No obstante, en las instituciones privadas han buscado la manera de auxiliar a los profesores pagando bonos adicionales al salario, por diferentes conceptos: De transporte, productividad, desempeño, por uso de tecnología, por plataforma digital; en fin, cada colegio lo adapta a su sistema, de allí el incremento en las mensualidades.

—Esto ha traído consigo otro problema, hay una gran morosidad a nivel nacional, que hoy día alcanza el 40 %. Entendemos que los padres hacen muchos sacrificios para cancelar las mensualidades, y somos flexibles, les damos oportunidad de ponerse al día, porque la situación es difícil para todos—.

“Ciudadanos de tercera”

El presidente de Andiep Táchira también precisó que se ha incrementado el retiro de estudiantes, debido a que sus familias se van al exterior. Pero aseguró no manejar las estadísticas exactas sobre esa situación.

Además le recordó al Estado que desde hace 15 años el gremio docente ha alertado al Ministerio de Educación sobre la situación de los docentes, considerados en Venezuela como ciudadanos de tercera, a diferencia de los países desarrollados.

—La educación es el pilar fundamental en el desarrollo de un país. Lamentablemente, en Venezuela, el Estado no reconoce el trabajo de los docentes como formadores de todos los ciudadanos del mañana. De allí la migración de docentes a otras naciones y el hecho que estén vacías las aulas de las escuelas de educación, porque nadie quiere estudiar esa carrera—.

En casos específicos, ante la ausencia de docentes, los institutos privados han tenido que recurrir al personal jubilado o a la comunidad de padres y representantes.

—El panorama es difícil, nada alentador, pero toca seguir luchando, motivar a los maestros y muchachos, y que el Gobierno tome en serio el problema educativo—apuntó.

Incierto el panorama

El éxodo de familias al exterior, la imposibilidad de pagar matrículas, la ausencia de escolares en las aulas, los elevados costos del transporte y la precariedad de la infraestructura educativa, hablan de unos niveles de agudización en la crisis económica que no permite a las instituciones educativas asegurar su operatividad para el próximo año.

Mariana Contreras